Primero ha sido la presidenta del Parlament, Laura Borràs, quien ha replicado a través de un contundente tuit a las palabras del president, Pere Aragonès, en que reprochaba a Junts que no había planteado ninguna alternativa a la mesa de diálogo. Pero acto seguido, la respuesta de Borràs se ha multiplicado a través de las redes con un texto idéntico que han publicado los dirigentes del partido, tanto de la ejecutiva como del grupo parlamentario.

"La mesa de diálogo es un eslogan que hace un año y medio que dura. Ni una sola concreción y tampoco hay ninguna en perspectiva que no sea el fracaso. Pedir concreción a los demás cuando eres tan pobre en tus concreciones no es aceptable. Pero la alternativa está: ¡unilateralidad"!, ha replicado Borràs.

Reproche de Aragonès

Con este tuit, la presidenta del Parlament respondía a Aragonès, que a primera hora de la mañana, en una entrevista en Catalunya Ràdio había reclamado a aquellos que se muestran críticos con la mesa de diálogo que planteen su alternativa.

"Si alguien cree que hay una vía alternativa, que lo explique y la concrete, de verdad. Creo que no se ha concretado esto, hasta que no se concrete, sólo hay una propuesta encima de la mesa, que es la negociación," ha subrayado.

Reacción en cascada

El tuit de Borràs ha destapado una reacción del resto de dirigentes del partido, que uno tras otro han reproducido el texto de la presidenta, o lo han retuiteado con llamamientos a la unilateralidad y a la confrontación que reclama el presidente del partido, Carles Puigdemont. Entre estos el vicepresidente del partido Josep Rius o la portavoz del grupo parlamentario, Mònica Sales, junto a buena parte de los diputados, entre los cuales Francesc Ten, Judith Toronjo, Joan Canadell o Francesc de Dalmases. Por su parte, la portavoz del partido, Elsa Artadi, ha hecho declaraciones públicas en el mismo sentido.

Precisamente, esta reacción se produce después de que los últimos días, Puigdemont ha hecho público un mensaje apelando de nuevo a la confrontación y al enfrentamiento con el Estado, y el día siguiente del encuentro de tres días que ha mantenido el grupo parlamentario con el presidente del partido y durante los cuales se han afianzado las propuestas del partido en esta dirección.

Junts no esconde su escepticismo ante las posibilidades de la mesa de diálogo, pero sus dirigentes insisten en que no tienen intención de plantear ninguna controversia que les pueda hacer aparecer como responsables del descarrilamiento de las conversaciones. No obstante, las palabras de Aragonés han llevado a romper este silencio, según fuentes del partido, con una clara voluntad de demostrar la unidad de esta formación en relación con este tema.

 

En la imagen principal, la cúpula de Junts en Bruselas con Carles Puigdemont con motivo de la reunión del grupo parlamentario / Junts