Junts asume que se queda sin la Diputació de Barcelona. El secretario general del partido, Jordi Turull, ha comparecido este miércoles por la tarde en la sede de la formación para explicar por qué no ha sido posible formar una mayoría alternativa que les permitiera llegar al gobierno del ente supramunicipal. Unas horas antes, el PSC rubricaba con Tot per Terrassa el acuerdo por el cual el partido de Jordi Ballart votará a favor de la candidata socialista Lluïsa Moret para presidir el órgano. Y justamente aquí radica la clave de todo: Turull ha detallado que tenían conversaciones con Esquerra Republicana y Tot per Terrassa, pero que no pudieron garantizar "riesgo cero" a estos últimos si daban apoyo a una presidencia de Junts. "Después de lo que pasó con la alcaldía de Barcelona, ahora sabemos que el PSC cuenta con el comodín del Partido Popular", ha añadido concretando cuál era el riesgo que lo podía torpedear.
En otras palabras, TxT quería tener asegurado que un pacto con los dos partidos independentistas saldría adelante siempre que los populares no replicaran en el órgano provincial la jugada que ungió a Jaume Collboni como alcalde barcelonés. Los juntaires no han podido asegurarlo: "Nosotros estábamos dispuestos a asumir el riesgo, pero otras formaciones no han optado por eso y han ido sobre seguro", ha indicado Jordi Turull.
Visto este escenario, los juntaires ven claro que no formarán parte del gobierno de la Diputació esta legislatura porque la suma del PSC, comunes y Tot por Terrassa llega a los 23 votos, mientras que ellos y Esquerra (con quien tampoco han logrado cerrar ningún acuerdo y fuentes de los juntaires aseguran haber percibido "poco entusiasmo" en los republicanos para lograrlo) también suman 23 escaños, pero en una segunda votación saldría investida la socialista Lluïsa Moret por el hecho de haber sido la lista más votada. De hecho, ante la imposibilidad de que la suma de los independentistas pueda prosperar, es bastante probable que los republicanos no voten la candidatura de Junts a la presidencia de la Diputació y escojan a su propio 'presidenciable'. Con todo, desde Junts reivindican que lo han intentado hasta el final y han admitido que, entre las fórmulas exploradas, estuvo la opción que la presidencia de la Diputació fuera para Tot per Terrassa: "Estábamos abiertos a estudiar todas las opciones que hicieran posible la mayoría alternativa", ha indicado el secretario general de Junts.
Junts no descarta que los dos diputados independientes de Impulsem Penedès voten la candidatura del PSC
El otro melón abierto para Junts es qué acabarán haciendo los dos diputados independientes que forman parte del grupo del partido en la Diputació. Se trata de los alcaldes de la formación local Junts per Igualada, Marc Castells, y el dirigente de Impulsem Penedès y alcalde de Torrelles de Foix, Sergi Vallès. Ninguno de los dos es militante de Junts, sino que simplemente firmaron un acuerdo de coalición para las elecciones municipales con Junts per Catalunya. Jordi Turull ha reconocido que, en el caso de la Diputació, hay "discrepancias" con Castells y Vallès. Una vez se ha conocido el acuerdo del PSC y los comunes con Tot per Terrassa, los dos diputados independientes han expresado que querían abordar con sus asociados y alcaldes de la zona si dan apoyo a Lluïsa Moret, hecho que permitiría que la socialista llegara a los 25 votos.
La estrategia de Castells y Vallès sería similar a la de Ballart, que sería garantizar que un acuerdo con quien gobierne les ayude a ligar proyectos para sus territorios. Las estrategias e idiosincrasias de cada territorio, a menudo, se alejan de los planteamientos nacionales, que es lo que ha buscado priorizar Junts descartando reeditar el gobierno con el PSC (estuvo encima de la mesa, pero se prescindió de esta en una ejecutiva nacional después de lo que pasó en el ayuntamiento de Barcelona). Esta noche hay reuniones con los alcaldes de Impulsem Penedès y, a partir de aquí, Marc Castells y Sergi Vallès tomarán la decisión final. Si finalmente optan por votar a Moret como presidenta, Turull ha declarado que "a partir de la próxima semana" estudiarán qué consecuencias puede tener, pero el secretario general juntaire ha querido subrayar que no ha habido ningún problema hasta las discrepancias con la Diputació y que los acuerdos para hacer listas conjuntas en las elecciones municipales y la configuración de consells comarcals han funcionado "positivamente".