"Nosotros haremos un congreso y espero que en este congreso nombremos todos por unanimidad al president Puigdemont, porque es nuestro presidente. El presidente de nuestro partido": Estas fueron las palabras del exalcalde de Barcelona, Xavier Trias, el pasado 10 de abril en una entrevista en TV3 en medio de la precampaña electoral del 12-M. Hacía un mes que el president Aragonès había convocado elecciones en el Parlament de Catalunya y nadie sabía que el PSC ganaría las elecciones con 42 diputados y Esquerra Republicana y los Comuns convertirían a Salvador Illa en nuevo president de la Generalitat un mes después, en medio de la vuelta de Puigdemont en Catalunya. Las palabras de Trias fueron un preámbulo y una premonición del congreso extraordinario de Junts que celebra este fin de semana en la Fàbrica Llobet-Guri de Calella. Puigdemont opta a la presidencia de Junts en un contexto en el cual el PSC mantiene la hegemonía institucional de Catalunya, teniendo en cuenta que gobierna en la Generalitat; en tres diputaciones (Barcelona, Tarragona y Lleida); en los ayuntamientos de Barcelona, Tarragona y Lleida; junto con el Gobierno.
Ante este contexto de derrota independentista y de pérdida de la mayoría del movimiento a las instituciones, Junts per Catalunya decidió convocar un congreso extraordinario para muscularse como alternativa a la hegemonía institucional del PSC. Puigdemont, si no hay una gran sorpresa de última hora, volverá a la presidencia del partido después de dos años en los cuales se ha querido centrar en su trabajo en el Consell de la República y en el Parlament Europeo. ¿El objetivo? Erigirse en principal alternativa al PSC, convertirse en el principal referente del independentismo, y renovar mensajes y liderazgos.
Esta mañana en #Calella con el director del Congreso de @JuntsXCat en @jmcruset. Empiezan a coger forma y tener buena pinta los espacios de la Fábrica Llobet-Guri donde celebraremos nuestro #Congrés y de donde tiene que salir una gran propuesta por #Catalunya. #NacióProgrésLlibertatIndependència pic.twitter.com/H1rjSc0vse
— Jordi Turull i Negre (@jorditurull) October 24, 2024
Nogueras, Castellà, Sales y Rius, los nuevos nombres fuertes de Puigdemont
Para hacerlo, el president en el exilio se rodeará de un equipo que mezcla experiencia y juventud. Jordi Turull repetirá como secretario general, mientras que la actual presidenta del partido, Laura Borràs, pasará a liderar la fundación de Demòcrates (FunDem), partido liderado por Antoni Castellà que, después de un acuerdo, confluirá dentro de Junts per Catalunya. De hecho, este pacto va en la línea de convertir el partido en el referente del independentismo y apostar por la unidad del movimiento. Precisamente, Castellà, que será uno de los vicepresidentes, aseguró en una entrevista en el Més324 de este miércoles que Junts tenía que ser el partido de la independencia en el cual pudieran caber catalanistas con el objectivo de ampliar sensibilidades. Puigdemont, tal como dice la ponencia organizativa, tendrá cuatro vicepresidentes: la portavoz en el Congreso, Míriam Nogueras; el líder de Demòcrates, Antoni Castellà; la portavoz en el Parlament, Mònica Sales; y el ya vicepresidente del partido, Josep Rius.
Míriam Nogueras ha ido ganando peso en los últimos años. Sobre todo desde que Junts es clave para la gobernabilidad de Pedro Sánchez. Fiel a el puigdemontismo, la 'capitana Nogueras' gana peso internamente. En cambio, Antoni Castellà es un político profesional que proviene de las filas de Unió Democràtica y que mantiene muy buena relación con todas las familias dentro de Junts. Mònica Sales será la principal cara de renovación de imagen del partido. La portavoz en el Parlament, que fue cabeza de lista en Tarragona en las anteriores elecciones, ya ha asumido las tareas de coordinadora del grupo parlamentario, mientras Albert Batet ha cogido un rol más institucional. Por su parte, Josep Rius es un hombre de confianza de Puigdemont, de Xavier Trias y ha sido la cara visible como portavoz del partido en los últimos años. Dos nombres que finalmente no ocuparán la vicepresidencia y que estaban entre las quinielas, pero que sí que formaran parte de la ejecutiva, son los de Albert Batet, que ha preferido centrarse en el grupo parlamentario, y Anna Navarro. Precisamente, Albert Batet y el president del Parlament, Josep Rull, serán miembros natos de la dirección por sus cargos institucionales.
Turull escoge juventud y experiencia
Por otra parte, del secretario general dependen la secretaría de organización, la de finanzas y un máximo de 25 vocales. Jordi Turull ha escogido a Judith Toronjo para organización para sustituir al borrasista David Torrents. Con Toronjo, diputada nacida en 1990 y forjada en la JNC, Turull lanza un mensaje de renovación de liderazgos, junto con el hecho que Salvador Vergés y Jeannine Abella -nuevas caras visibles en el Parlament y cabezas de lista en Girona y Lleida- también formarán parte de la nueva dirección como vocales. Por su parte, la concejala de Reus, senadora y experimentada, Teresa Pallarès, seguirá en finanzas. La idea de la nueva ejecutiva es de dotarla de más funcionalidades. Es decir, cada vicepresidencia asumirá más responsabilidades, mientras que cada vocal tendrá un rol. De hecho, quien también seguirá como responsable de la política municipal será David Saldoni.
Otros dirigentes que se da por hecho que seguirán como vocales son los exconsellers Jaume Giró, Victòria Alsina i Damià Calvet, este último como principal hombre fuerte de Josep Rull. La corriente de izquierdas tendrá una representación de cuatro personas, entre las cuales probablemente habrá el coordinador de Acció per la República, Oriol Izquierdo, y la nueva diputada Ennatu Domingo, que también irá cogiendo peso político. Por parte de Demòcrates, más allá de Antoni Castellà, se podría incorporar la concejala en el Ayuntamiento de Barcelona Assumpció Laïlla. También se da por hecho que el diputado en el Congreso Josep Maria Cruset entrará en la ejecutiva, mientras que habrá que ver si acaba entrando algún alcalde. De hecho, como mínimo, en la ejecutiva habrá el presidente del espacio municipalista. Y es que en este congreso también se vota el presidente de este nuevo órgano que organiza todos los electos que lideran las candidaturas de la coalición que tengan cabida, como también partidos municipalista y coaliciones como Impulsem Penedès, Impulsem Lleida, Junts per Igualada o Junts per Martorell.
Pilar Calvo nueva presidenta del consell nacional y la caída del borrasismo de la dirección
La diputada en el Congreso Pilar Calvo asumirá la presidencia del consell nacional en sustitución del president del Parlament, Josep Rull. De hecho, era un cargo que había sonado inicialmente para Borràs, pero ella consideraba que no le daba bastante proyección, aparte de no estar remunerado. Precisamente, la no continuidad de Borràs en la presidencia de Junts irá acompañada de la desaparición de los borrasistas dentro de la dirección del partido. Francesc de Dalmases, exvicepresidente del partido, ya dimitió en el 2022 después de ser acusado de maltratar a una periodista.
Tampoco continuará la vicepresidenta Aurora Madaula, mientras que David Torrents no seguirá de secretario de organización, aunque podría continuar en la ejecutiva. Otros afines en Borràs que todavía formaban parte de la ejecutiva nacional se han ido cayendo durante el camino. Cristina Casol fue expulsada del partido después de las acusaciones de violencia machista dentro del grupo parlamentario, mientras que Jaume Alonso-Cuevillas desde que dimitió de diputado no ha formado parte de ninguna reunión más de la ejecutiva. En principio, la alcaldesa de Vilobí del Penedès y secretaria del AMI, Ester Vallès, tampoco seguirá.
Los interrogantes: listas cerradas, el plazo de los seis meses para optar a un cargo o la limitación de cargos
Los delegados en el congreso de Junts también tendrán que avalar hasta tres ponencias. La estratégica; la del Modelo de País; y la de organización. Donde quedan más enmiendas vivas es en esta última. De las dos mil enmiendas que se presentaron han quedado 354 vivas después de negociaciones, transacciones o que hayan decaído durante el proceso de las asambleas territoriales, sectoriales e ideológicas. De estas 354 enmiendas vivas, un total del 60% de estas forman parte de la ponencia organizativa. Aunque pueden decaer hasta el último momento -los ponentes siguen negociando- se mantienen las enmiendas en los apartados que estipulan que las elecciones de cargos serán con listas cerradas o bien la antigüedad de seis meses que hasta ahora se tenía que tener para acceder a un cargo orgánico. Otra que también se mantiene son la del sistema de contabilidades de cargos al partido e instituciones.
Con respecto a la enmienda a las listas cerradas, reclama que se pueda votar a los cargos de forma abierta. Es decir, a candidatos y no a toda una lista en bloque. En el último congreso se votaba individualmente a cada candidato y había un mínimo del 50% de los votos para poder acceder. Ahora, se vota todo un bloque: la presidencia con las vicepresidencias; el secretario general con organización finanzas y los vocales; el presidente del consejo nacional; o el defensor del militante. Por otra parte, en este congreso se elimina el requisito de tener que tener seis meses de militancia para optar a un cargo orgánico, un hecho que está pensado para integrar sin ningún tipo de problema a los dirigentes de Demòcrates. Finalmente, la tercera enmienda polémica se basa en limitar los cargos orgánicos e institucionales. Un redactado que va dirigido a Josep Rius, que, si la militancia lo avala, sería diputado en el Parlament, concejal en el Ayuntamiento de Barcelona, vicepresidente y portavoz del partido.
La evolución del congreso
Junts tendrá que avalar las tres ponencias este fin de semana que incorporan una hoja de ruta sobre inmigración, sobre vivienda o fiscalidad, como también una estrategia en Catalunya y en el Congreso. El congreso empiezará el viernes en las 18 horas con la bienvenida institucional y el informe de gestión de la actual ejecutiva por parte de la presidenta del partido, Laura Borràs, y del secretario general, Jordi Turull. Una vez finalizado esto, empezará el trabajo en ponencia de los tres textos. El sábado, se arrancará a las 9 horas el trabajo de cada una de las tres ponencias con un paréntesis en algún momento del día, que será cuando quede definida la ponencia organizativa. Entonces, se convocará el plenario, que votará la ponencia de organización y, una vez aprobada, inicia un periodo de 20 horas para presentar las candidaturas. Con toda probabilidad, solo se presentará la candidatura de Carles Puigdemont, que tendrá que ser avalada el domingo por la mañana por todos los militantes de forma telemática.