Los desacuerdos entre ERC y Junts tienen un curioso reflejo en las ruedas de prensa que los dos partidos protagonizan los lunes. Junts ha asegurado este mediodía que las conversaciones con ERC no han experimentado ningún punto de inflexión este fin de semana, insiste en que en ningún momento se planteó el 1 de mayo como ultimátum para el acuerdo y asegura que en las conversaciones con los republicanos no se ha puesto en ningún momento encima de la mesa el escenario de un gobierno en solitario de Esquerra.
La portavoz de Junts, Elsa Artadi, ha comparecido cuando todavía estaba en marcha la rueda de prensa de ERC en que la republicana Marta Vilalta explicaba que la reunión de los dos partidos del jueves y, en especial, del sábado en la prisión de Lledoners se ha convertido en "un punto de inflexión" que permite que Esquerra "aparque de momento" el escenario de un gobierno en solitario.
El jueves los negociadores celebraron una primera reunión formal en Lledoners / Eva Parey
Desde la sede republicana, Vilalta aguaba la espuma de especulaciones surgidas este fin de semana sobre la posibilidad que la falta de acuerdo deje a Junts fuera del gobierno, y no obstante la intervención de Artadi en rueda de prensa telemática se ha dedicado a enmendar buena parte de sus argumentos. Al final, para llegar al mismo lugar y asegurar que los negociadores no se plantean un gobierno de Aragonès sin Junts.
"Por parte de ERC no se nos ha puesto ninguna alternativa sobre la mesa que no sea un gobierno de coalición. Todo el trabajo interno que estamos haciendo es para un gobierno de coalición. Entendemos que es el mejor escenario. No hemos abierto otras posibilidades ni se nos han puesto sobre la mesa", ha asegurado Artadi cada vez que se le ha interrogado sobre la alternativa de que su partido vote la investidura de Pere Aragonès sin entrar al ejecutivo.
Aunque fue el secretario general de Junts, Jordi Sànchez, quien planteó esta posibilidad, Artadi se ha negado hoy a valorar esta alternativa.
"Desde Junts no tenemos ninguna propuesta concreta por parte de ERC para evaluar una alternativa a un gobierno de coalición", ha insistido ante las preguntas sobre la decisión de los republicanos en apartar esta opción.
Ni inflexión ni ultimátums
Igualmente, Artadi ha rechazado que la reunión en Lledoners fuera un punto de inflexión en las conversaciones que haya permitido superar la fecha del 1 de mayo que los republicanos habían situado como límite, y ha insistido en que este tope sólo ha estado presente en declaraciones públicas y nunca dentro de las negociaciones.
Sobre el llamamiento de ERC a cerrar el acuerdo tan pronto como sea posible, ha rechazado hablar de plazos, se ha limitado a recordar que "la única fecha límite es el 26 de mayo" y a insistir en que Junts se puso a disposición del acuerdo "desde el día siguiente de las elecciones".
Consulta a la militancia
Artadi ha asegurado que una vez la ejecutiva dé el visto bueno al acuerdo con ERC, se someterá a la validación de los militantes para que "sean las bases las que decidan el camino que se tiene que seguir". No obstante, ha evitado entrar en más concreciones sobre las cuales se someterá a la decisión de las bases.
Artadi se ha negado también a valorar el contenido de las negociaciones. Se ha limitado a admitir que todavía no se ha entrado a discutir la propuesta de estructura de Govern que les trasladó Esquerra, que la carpeta sobre estrategia independentista sigue abierta, y que esta semana será intensa desde el punto de vista de trabajo sectorial, dado que habrá que abrir el grupo que abordarà el tema institucional.
Por otra parte, Junts ha anunciado que después del consejo nacional de este fin de semana pondrá en marcha la elección de los consellers en el territorio. En total se tienen que escoger 92 miembros. Los candidatos necesitarán que un 10% de afiliados los avalen para poder optar a esta responsabilidad.
En la imagen principal, Elsa Artadi en un momento de la rueda de prensa de hoy