El grupo municipal de Junts en el Ayuntamiento de Barcelona, que lidera Jordi Martí Galbis, pide al consistorio de Jaume Collboni, al Govern de la Generalitat de Salvador Illa y al Ministerio de Transportes que se mantenga este 2025 la bonificación que abarata el precio de los billetes de transporte público, como la T-Usual y la T-Jove. Las nuevas tarifas de los billetes las tendrá que aprobar pronto la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) y fuentes de las administraciones públicas, gobernadas las tres por los socialistas, han señalado que probablemente no se mantendrá la bonificación del 50% que ha habido durante los últimos dos años para ayudar a las familias con la inflación porque con los precios actuales no se cubre el gasto que supone el servicio y, por lo tanto, es inviable.
Martí Galbis ha aseverado este jueves en rueda de prensa que esta es "una cuestión muy importante, desde el punto de vista político, también social y económico" y ha lamentado la espera para saber si finamente continuarán o no los precios más asequibles. "El Govern de Salvador Illa en la Generalitat, y el del alcalde Collboni aquí en el Ayuntamiento, están esperando a ver qué deciden sus 'jefes' de Madrid", ha reprochado el político juntaire. También ha criticado que se plantee la posibilidad de eliminar la bonificación "en el actual contexto de impuestos elevados y de inflación". "Esta supresión sería también un mensaje equivocado, sería dejar de apostar por las políticas de fomento y promoción del transporte público", ha añadido.
El líder de Junts en Barcelona ha anunciado también que en la próxima Comisión de Ecología, Urbanismo, Vivienda y Movilidad del consistorio, que se tiene que celebrar el martes que viene por la tarde, la concejala Francina Vila someterá a votación una proposición para reclamar el mantenimiento bonificaciones. El texto de la iniciativa que han presentado este jueves también pide ejecutar todas las inversiones de Rodalies para modernizar la red y "garantizar la puntualidad y la calidad de este servicio público".
La rebaja de precios pende de un hilo
Los billetes de tren a precio asequible penden de un hilo. Desde el 2022 estaban bonificados por la administración y han sido estos dos años a la mitad del precio que costaban antes. La T-Jove (título válido hasta los 30 años y con viajes ilimitados durante 90 días) costaba ahora 42,60 euros y la T-Usual (tarjeta con viajes ilimitados durante un mes), 21,35 euros. El descuento del 50% llega por dos vías. Por un lado, el Gobierno ha financiado la gratuidad de los abonos de Renfe y un 30% de esta rebaja. El 20% restante de los descuentos son a cargo de la Autoritat del Transport Metropolità (consorcio formado por el Govern, en un 51%, y las administraciones locales).
Ahora bien, este descuento podría acabarse pronto. El ministro de Transportes, Óscar Puente, ya adelantó que no se mantendría todo igual a partir de enero. Por su parte, el secretario de Movilidad y Transporte, Manel Nadal, y la directora general, Susi López, en un acto de la Federació Empresarial Catalana d'Autotransport de Viatgers (FECAV) detallaron que el coste de esta rebaja es "inasumible". Con todo, Nadal añadió que les gustaría mantener las bonificaciones de alguna manera, como podría ser una bonificación inferior o, como ya ha apuntado anteriormente a la consellera de Territori, Sílvia Paneque: en función de la renta de los usuarios, una ayuda a quien lo necesite más y no de manera indiscriminada.