El vicepresidente cesado el miércoles pasado, Jordi Puigneró, ha asegurado que si su restitución tiene que suponer un handicap para llegar a un acuerdo con ERC, él renuncia. En declaraciones en RAC1, Puigneró ha subrayado que ahora lo más importante es que se cumplan y se acepten los tres puntos claves del acuerdo que Junts propuso a ERC y que si su restitución tiene que suponer un problema no tiene ningún inconveniente al renunciar. De hecho, Puigneró asegura que en la última propuesta enviada a ERC su retorno al Govern ya no es una condición obligatoria.
Por su parte, la presidenta de Junts, Laura Borràs, ha explicado que en la última propuesta de que han hecho llegar al presidente de la Generalitat ya no aparece la condición de restituir al vicepresidente Jordi Puigneró. "El mismo Puigneró nos pidió que no quería ser ningún obstáculo en la posible negociación", ha añadido en una entrevista a Catalunya Ràdio. La última propuesta, según ha dicho, se envió este domingo por la noche después de la reunión entre Aragonès y el secretario general de Junts, Jordi Turull.
Pérdida de confianza
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, destituyó al vicepresidente, Jordi Puigneró, al perderle la confianza. "Me duele pero es del todo necesario para fortalecer el Govern", aseguró el miércoles pasado por la noche el presidente en una comparecencia desde el Palau de la Generalitat. Según explicó, Puigneró no le informó a pesar de conocer de que el presidente de Junts en el Parlament, Albert Batet, plantearía una cuestión de confianza en el debate de política general. Según Aragonès, Junts tiene que proponer un nombre para la vicepresidencia que "ayude a cambiar la dinámica y a rehacer las confianzas". El presidente comunicó la decisión a Puigneró después de una reunión de más de tres horas con el secretario general de Junts, Jordi Turull.
El viernes por la noche, Junts envió una propuesta al dirigente de ERC con varias condiciones para mantener la coalición de Govern, entre las cuales estaba la restitución del vicepresidente cesado, pero Aragonès la rechazó. Aragonès subrayó en una entrevista en La Vanguardia, que se publicó poco después de hacerse pública la propuesta de Junts, que era evidente que la propuesta "está pensada para no llegar a ningún acuerdo". Y añadió: "Por lo tanto, si tienen una propuesta seria, con voluntad de acordar, como he dicho siempre, la valoraremos". Al mismo tiempo, Aragonès apremió a Junts a tomar una decisión "ahora" y con la "máxima celeridad". "Si no lo hace, la tomaré yo", concluyó.
La reflexión de Puigneró
El vicepresidente destituido ha explicado detalladamente cómo recibió la comunicación de su cese el miércoles por la noche y ha explicado que podía deducirlo ya que hacía rato que altos cargos de Junts entraban y salían de la Generalitat. De hecho, fue el secretario general de Junts, Jordi Turull, quien le dijo que el presidente había planteado la posibilidad de cesarle pero que él se había negado y le había dicho que "eso tendría consecuencias". Puigneró ha seguido con el relato de aquella jornada y ha asegurado que cuando entró en el despacho del presidente Aragonés éste no sabía cómo comunicarle la decisión: "Yo intenté sacar hierro a la situación porque sé que él no tomó la decisión a gusto. Finalmente lo logró verbalizar y yo lo acepté y le dije que había sido un honor estar en el Govern".
Ahora bien, Puigneró ha relatado que no abandonó el despacho de Aragonès sin antes hacerle una reflexión y sin antes dejar constancia de que no se lo tomaba como nada personal "porque el presidente y yo hemos tenido muy buena relación a nivel personal y, por lo tanto, no se me puede acusar de deslealtad". El videpresidente destituido ha narrado las palabras que le dijo al presidente del Govern: "Hombre presidente, evidentemente aquí todo el mundo comete errores y todos tenemos que hacer autocrítica, pero tú eres el presidente y deberías de ser el primero en hacerla. Fuiste investido con los votos de un partido político que se llama la CUP, que ya está fuera del acuerdo, y ahora cesas al vicepresidente del Govern del otro partido que votó tu investidura (Juntos). Después de un año y medio te has quedado solo, debes hacer una reflexión". Desde ese día, ha asegurado, no ha vuelto a hablar con Aragonès pero sí ha recibido mensajes de altos cargos de ERC. Emocionado, Puigneró ha explicado a los oyentes que su pareja fue la primera en recibir la noticia de la destitución.
Crida a la generosidad
Durante la entrevista, Jordi Puigneró ha insistido mucho en recordar los resultados de las últimas elecciones y la formación del Govern: "Un Govern de coalición como este requiere de lealtad y sobre todo de generosidad". "Ha faltado generosidad para entender que este no es un Govern de 60-40, es un Govern de empate, de 33 y 32 diputados," ha apuntado Puigneró que ha indicado que este hecho demuestra que las políticas únicas no sirven.