Ya hay fecha para el próximo enfrentamiento entre Corinna Larsen y Juan Carlos I. El juez del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales, Matthew Nicklin, ha convocado una audiencia de 4 días para el próximo 18 de julio para tratar la demanda civil por acoso, seguimiento ilegal y difamación que Corinna Larsen presentó contra Juan Carlos I, según adelanta El Periódico. Larsen, examante del Borbón, denuncia que fue víctima de una campaña de acoso, y espionaje organizado por el rey con el apoyo de los servicios de inteligencia españoles en el periodo de 2014 a 2020, cuando el monarca intentaba recuperar los 65 millones de euros que le había "regalado", y hasta la actualidad. La audiencia viene después de que la justicia británica concediera la inmunidad de Estado al emérito hasta el 18 de junio de 2014, momento en el que abdicó.
Inmunidad limitada
Corinna Larsen interpuso la demanda contra el emérito el año 2020, al considerar que después de acabar su relación amorosa, tanto la Casa Real como el CNI intentaron desprestigiarla. Los abogados de Larsen denunciaron vigilancia ilegal, después de que ella se negara a devolverle los 65 millones de euros que, presuntamente, Juan Carlos le habría dado el año 2012. La defensa de Corinna ha subrayado, después de la inmunidad concedida a Juan Carlos I, que es "muy limitada". El pasado mes de diciembre, el abogado Michael Kim, del despacho Kobre & Kim recordaba que la demanda todavía tiene recorrido, ya que la decisión, el blindaje del cual dispone el emérito solo afecta su reinado, hasta 2014. "La mayor parte de la demanda no se ve afectada y tendría que ir a juicio", añadía el letrado en un comunicado.
A finales del año pasado, Corinna estrenó su pódcast "El Rey y yo", donde relató tanto los mejores momentos de su "estrecha amistad", como también los peores, protagonizados por las amenazas del emérito a la princesa alemana, que ha asegurado que ha llegado a sufrir por su vida. En el penúltimo capítulo de la serie, bajo el nombre "Una alma oscura. Juan Carlos, la conspiración y los audios de Villarejo", la empresaria entraba en detalles de su relación con el excomisario y como fue víctima de un robo en uno de sus lujosos pisos. Una de las principales revelaciones de la princesa es que los servicios secretos españoles, es decir, el CNI, intentaron crear un plan para implicarla en un delito de malversación. Una idea que a Juan Carlos I le pareció perfecta. Así, explicaba que el CNI entró en su apartamento en Mónaco, dónde guardaba información importante, y se la llevó para poder acusarla de ser una ladrona, según narraba ella misma.