Ocho meses después de que se presentaran dos querellas criminales por parte de la izquierda independentista contra una presunta práctica de espionaje por parte del Govern y los Mossos, estas han sido admitidas por el juzgado de instrucción número 3 de l'Hospitalet de Llobregat, que ha ordenado las diligencias previas, según ha adelantado la Directa.
La primera querella fue presentada por Alerta Solidària por suplantación de identidad y revelación de secretos en nombre de Lluna Berlanga, portavoz del colectivo juvenil La Forja. Según denunciaron, había diversos correos en que se habían hecho pasar por ella. La segunda agrupa el resto de casos de espionaje digital contra La Forja.
Según explica el diario, ahora la justicia dispone de dos vías para descubrir quién está detrás de la trama de suplantaciones, que afecta a una quincena de direcciones de correo electrónico y más de una sesentena de mensajes de organizaciones de la izquierda independentista, movimientos sociales y sindicatos libertarios.
CTTI
La querella de la Forja se interpuso contra el Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información de la Generalitat de Catalunya (CTTI), ya que al menos en uno de los casos las conexiones del suplantador se realizaron desde esta empresa pública. La investigación de la Directa pudo confirmar que la IP del CTTI estaba vinculada a los Mossos y al complejo de Egara.
A pesar de la admisión a trámite de la querella, desde Alerta Solidària, la abogada Eva Pous ha denunciado que el auto no resuelve sobre todas las diligencias solicitadas, motivo por el cual lo han recurrido. Y es que la jueza sólo ha ordenado la investigación sobre a qué compañía pertenece la IP del CTTI para aclarar en qué domicilio se hizo la instalación o cuáles son los datos del titular de la conexión, pero no el resto.
En paralelo a la vía judicial, la División de Asuntos Internos (DAI) de los Mossos d'Esquadra abrió una investigación, que se concretó en diciembre con un expediente disciplinario hacia un agente de Mossos de la Comisaría General de Información que fue apartado de sus funciones. El grupo parlamentario de la CUP pidió una copia del expediente interno, las conclusiones y las sanciones impuestas, pero la solicitud fue denegada.
CUP-Govern
El recorrido judicial que puedan tener estas querellas podría afectar a las relaciones entre el grupo de la CUP y el Govern, que depende de los anticapitalistas para mantener su estabilidad parlamentaria y la mayoría independentista.
Así pues, el presunto caso de espionaje se suma al resto de cuestiones que separan a los cupaires de ERC y Junts como son la ampliación del aeropuerto del Prat, la mesa de diálogo, el plan para las renovables y las acusaciones particulares de la Generalitat contra manifestantes independentistas.