Cuatro jóvenes del Camp de Tarragona han sido juzgados por su participación en las protestas postsentencia del procés en octubre de 2019. Los encausados se enfrentan apenas de entre 12 y 18 meses, acusados por los delitos de desórdenes públicos, atentados contra la autoridad, daños y lesiones. La asociación Alerta Solidaria asegura que no se ha aportado ninguna "prueba concluyente" y que las acusaciones se basan en "atestados falsos" de los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional. En este sentido, han recordado que la "macrocausa contra el independentismo" sumó 18 causas, de las cuales 14 quedaron archivadas. El juicio ha empezado este lunes en el juzgado de lo penal número 1 de Tarragona, donde casi 50 personas se han concentrado para expresarles su apoyo.
❌Dels 18 investigados por la obsesión de Fiscalía y Mossos, 4 entran en los juzgados por|para un nuevo juicio político
— Alerta Solidaria (@AlertaSolidaria) June 5, 2023
¡Con todos ellos, por|para los 3 años y medio de procés|proceso, para exigir la libre absolución y para seguir reforzando la lucha por|para la libertad por todos los Países Catalanes!
����️#NoEsteuSols!!! pic.twitter.com/oLdYgNFPQU
Apoyo a los acusados
Los cuatro jóvenes han llegado a los juzgados cerca de dos cuartos de diez de este lunes recibidos con gritos de 'No estáis solos' y aplausos por partes de los participantes en la concentración convocada desde las 9:00 horas para darles apoyo. Todos forman parte de los dieciocho investigados en la causa instruida por el Juzgado de Instrucción número seis de Tarragona, que arrancó hace más de tres años a consecuencia de los disturbios y los disturbios que hubo después de la sentencia del 1-O. "Esa noche—16 de octubre de 2019— hubo hasta catorce detenciones, una de ellas un menor de edad, todo eso se ha conformado en una macrocausa contra dieciocho personas, de estas catorce se archivaron", ha subrayado Lluís Madurell, miembro de Alerta Solidaria.
Madurell ha defendido que los encausados protestaron de forma "pacifica" en las manifestaciones postsentencia y que no han cometido ninguno de los delitos por los cuales se les juzga. Él, que fue uno de los dieciocho encausados, ha denunciado la criminalización del movimiento independentista. "En mi caso se archivó, pero sigue para ellos, igual que para centenares de jóvenes que también se enfrentan a juicios y a peticiones totalmente desorbitadas, no solo para ser independentistas, sino para ser antifascistas y feministas; la represión es muy amplia y nos afecta en todos, solo nos queda seguir luchando y plantar cara a la represión", ha defendido. Aparte, ha denunciado que no hay ninguna prueba concluyente contra los acusados, y según denuncia, las acusaciones se basan en los atestados policiales conjuntos de los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional, los cuales, dice, utilizan archivos de personas activistas para "reprimirlos".
"Esperamos su absolución, total y absoluta, y que se haga un toque de atención a todos los servicios de seguridad porque están llevando a cabo toda una campaña de criminalizar a la juventud movilizada y utilizan todo tipo de mecanismos, ya sea esta falsedad que nos encontramos en los atestados de asignar a personas que estaban en una manifestación una serie de delitos que no cometieron", ha concluido Madurell.