Los eurodiputados de JxCat han enviado una carta al resto de miembros del Parlamento Europeo en la que "les llaman la atención" sobre lo que describen como "infiltraciones fascistas" en las fuerzas armadas españolas. La carta la han firmado los eurodiputados Carles Puigdemont, Toni Comín y Clara Ponsatí.
En concreto, recuerda que el 29 de noviembre 73 altos mandos de la reserva del Ejército de Tierra español enviaron una carta a Felipe VI mostrándole "apoyo y lealtad" ante lo que describen como "estos momentos difíciles para la patria" a causa del gobierno "social-comunista" con el apoyo de "terroristas y partidos proindependencia". La misiva recuerda que mandos en activo sabían que se estaba redactando la carta, no le dieron importancia y no se está llevando a cabo ninguna investigación.
Añaden que el 3 de diciembre se supo que cuarenta militares españoles de la reserva del Ejército del Aire habían constituido un grupo de Whatsapp donde se expresaban opiniones como la necesidad de aniquilar a "26 millones de hijos de puta, niños incluidos". Recuerdan que la ministra de Defensa, Margarita Robles, después de poner estos hechos en conocimiento de la Fiscalía, afirmó que las fuerzas armadas son "completamente democráticas".
Hoy hemos enviado a todo el MEPs del PE una carta detallando los darres hechos que evidencian la fuerte influencia de la extrema derecha dentro del ejército y los cuerpos de seguridades españoles. A diferencia de Alemania, en España la impunidad de la extrema derecha es total. pic.twitter.com/V9wlAT5PTQ
— Juntos y Libres por Europa (@JuntsEU) December 22, 2020
Finalmente, añaden que esta misma semana ha sorprendido a la opinión pública la noticia de que un grupo de soldados en activo organizó un encuentro el 8 de diciembre del 2019 donde se hicieron saludos fascistas y se cantaron canciones en homenaje a la División Azul, la cual recuerdan que es una unidad militar que participó en el frente oriental de la Segunda Guerra Mundial al lado del ejército nazi. Concluye que sólo tres de estos militares fueron amonestados con una falta de disciplina menor.
En la carta se contrastan estos hechos con la decisión del Ministerio de Defensa del gobierno federal alemán de desmantelar y reestructurar unidades de élite después de encontrar signos de infiltración de extrema derecha y de que el Estado de Renania del Norte Westfalia suspendiera a 29 policías por estar implicados en un grupo de wWhatsapp de extrema derecha.