Giro de guion en el marco de las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez. Con la reunión entre ERC y el PSOE todavía en marcha, Junts per Catalunya ha anunciado que retira del próximo pleno -que empieza este miércoles- la moción que presentaron la semana pasada que reclamaba "acordar una solución democrática al conflicto que no puede ser otro que el ejercicio del derecho de autodeterminación". Así lo ha comunicado su portavoz, Eduard Pujol, que ha argumentado que no quieren dar excusas a los socialistas para que se levanten de la mesa de diálogo.
La decisión se ha tomado después de haber hablado con los socios de ERC, que una vez materializada la retirada, prestarán senadores a JxCat para que puedan tener grupo propio en el Senado y presionarán a ALDE para que Puigdemont y Comín sean aceptados en su grupo parlamentario europeo. A pesar de ello, Torra y compañía han obviado este hecho en sus explicaciones públicas. Aseguran haber constatado que por una cuestión de oportunidad política, es conveniente dejar este debate en stand by mientras duren las conversaciones, en las cuales es ERC quien lleva la batuta y donde JxCat aspira a tener protagonismo. A través de este gesto, la intención es visualizar que el grupo que preside Laura Borràs en el Congreso no es "el del bloqueo". Fuentes de ERC confirman a este diario que estaban al corriente del movimiento. Pujol ha explicado que dejan la moción "encima de la mesa" y que no descartan volverla a presentar más adelante.
"Este debate podría ser mal interpretado y utilizado por el PSOE para no tener una actitud positiva en las negociacions", ha afirmado a Pujol en declaraciones a los medios de comunicación desde los pasillos del Parlament de Catalunya. Por ello, interpretan que es "oportuno hacer este gesto" de "no tratar durante este pleno" la iniciativa sobre autodeterminación.
La moción en cuestión la entró JxCat la semana pasada y la validó la Mesa. El texto, que de momento queda aplazado a la espera de volver a llevarlo a un pleno cuando pasen las negociaciones, recogía las principales condiciones que el espacio postconvergente pone a los socialistas: que se reconozca que nos encontramos ante un conflicto político, que hace falta diálogo, que la única solución es un referéndum de autodeterminación, que es necesario reconocer a Torra como interlocutor, que es imprescindible la mediación internacional y que se debe poner fin a la represión.
El anuncio llega horas después de que la cúpula del partido viajara a Waterloo para reunirse con Carles Puigdemont. Un encuentro que contó, también, con la presencia del president Quim Torra.