El pistoletazo de salida del congreso fundacional de JxCat como partido ha activado un calendario de diez semanas a lo largo de las cuales se tendrá que configurar la nueva formación. Una vez escogida la mesa del congreso y los responsables de las ponencias congresuales, la primera carpeta que se cerrará será la nueva ejecutiva. Este mismo domingo se abrió el plazo de presentación de candidaturas, que acaba el próximo sábado en las 23,59h.

De momento, la incógnita es si habrá una sola candidatura de consenso o si habrá más de una lista, que podría plantear un pulso entre las propuestas de Jordi Turull y Josep Rull, de un lado, y las de Jordi Sànchez por otro.

El nuevo partido dispone de siete días para desvelar la incógnita. Pero ahora mismo, y a pesar de la apuesta mayoritaria porque haya una sola candidatura, no se descarta que las diferentes tradiciones políticas que encarnan los presos de Lledoners se concreten también en diferentes propuestas. Mientras Turull y Rull han sido personas clave en el PDeCAT, Sànchez apostaría por marcar distancias con aquellas siglas y que esta voluntad se hiciera evidente en la composición de la dirección.

Puigdemont

Nadie pone en duda que la presidencia, que se considera un cargo no ejecutivo, quedará en manos de Carles Puigdemont. Con este cargo, los simpatizantes escogerán hasta cuatro vicepresidencias, teniendo en cuenta que hay que garantizar en todo momento la paridad. Aquí se apunta que tendrían que tener presencia los presos políticos.

Imagen del congreso fundacional de JxCat con presos políticos y exiliados / JxCat

La duda se plantea, sin embargo, a la hora de abordar a la nueva ejecutiva, que se formaliza en dos votaciones, una para la Secretaría General -secretario general, y responsables de organización y de finanzas- y otra para los 18 miembros restantes de la dirección. Los 21 nombres que integren este órgano se convertirá en uno de los primeros elementos que tiene que permitir tomar el pulso al nuevo partido. Es en este punto donde aparecen las discrepancias que podrían desembocar en dos candidaturas.

Fuentes del nuevo partido aseguran que ahora mismo todas las posibilidades están abiertas, que el objetivo es "hacerlo bien y que los afiliados decidan democráticamente".

Asimismo, ante la voluntad de que la paridad marque los órganos de gobierno del nuevo partido, se ha apuntado que la secretaría general tendría que estar en manos de una mujer, las quinielas apuntan a los nombres de Elsa Artadi, Marta Madrenas, Anna Erra, Laura Borràs, Meritxell Budó, Gemma Geis...

Turull, Artadi, Sanchez, Rull y Madrenas, en un momento del congreso fundacional / JxCat

Tampoco se ha cerrado del todo, sin embargo, la posibilidad de que Jordi Sànchez asumiera la secretaría general. Aunque fuentes de JxCat aseguran que está descartado, dirigentes de la Crida mantienen viva esta posibilidad y aseguran que "no hay nada descartado". Con todo, estos dirigentes insisten en que lo mejor sería una candidatura el máximo de unitaria posible y esta es la opción por la cual apuestan mayoritariamente.

La secretaría general y los 18 miembros restantes de la ejecutiva se decidirán en dos votaciones en lista cerrada y desbloqueada, pero tendrá que ser paritaria. A pesar de que la lista de 18 nombres deberá estar avalada por un candidato a la secretaria general, a la hora de la votación se podrá apoyar nombres de diferentes candidaturas.

La votación se hará los días 7, 8 y 9 de agosta y previamente, a partir del 3 de agosto, habrá una campaña electoral.

El PDeCAT continúa las conversaciones

Por su parte, la ejecutiva del PDeCAT ha abordado esta mañana el estado de las conversaciones con JxCat y la reunió del consejo nacional previsto para este jueves. Miembros de la cúpula del partido han insistido en mantener las conversaciones para conseguir cerrar un acuerdo con JxCat que evite la ruptura en este espacio político.

Tanto el presidente del partido, David Bonvehí, como el secretario de Organización, Ferran Bel, han apostado por continuar intentandolo, aunque desde la cúpula demócrata se insiste que a medida que avanzar el calendario la posibilidad de este acuerdo es cada vez más complicada.