Junts pel Sí ha presentado este miércoles una interpelación en el pleno sobre la planificación y gestión del Aeropuerto de Barcelona – El Prat, que ha estado sufriendo largas colas reiteradamente en el último mes. La interpelación de Junts pel Sí ha evidenciado el rechazo del Govern a la gestión del Estado, a quien ha atribuido un "error clamoroso de planificación".
Uno de los desencadenantes del caos en el aeropuerto fue el cambio de la normativa para moverse por el espacio Schengen con el objetivo de reforzar la lucha contra el terrorismo. De esta manera, los pasajeros europeos también tienen que mostrar el pasaporte o DNI en las aduanas a la hora de salir o entrar de territorio Schengen. Esta nueva regulación no se contrarrestó con la dotación de personal ni equipamiento necesario, lo que provocó colas de hasta tres horas en el aeropuerto.
El conseller de Territori, Josep Rull, ha asegurado en el pleno que esta falta de planificación se debe a la "concepción radial del Estado a nivel de infraestructuras", que contempla el aeropuerto de Madrid – Barajas como el principal, mientras que el resto son "subsidiarios".
El diputado Joan Ramon Casals, encargado de presentar la interpelación, ha ido un paso más allá y ha asegurado que el Estado "golpea" a fin de que la Generalitat no pueda salir adelante. Así, ha atribuido el caos del aeropuerto de El Prat a un "boicot" por parte del Gobierno de Mariano Rajoy a fin de que el aeropuerto de la capital catalana sea "menos competitivo que Barajas, la joya de la corona de AENA."
Ante esta situación, el Govern "quiere enviar un mensaje a la comunidad internacional diciendo que nos implicaremos para que el aeropuerto de Barcelona siga teniendo los mismos niveles de reputación que hasta ahora". Por eso, el Govern y Junts pel Sí han pedido que se traspasen las competencias a fin de que sea la Generalitat quien gestione el aeropuerto de Barcelona. "Queremos tomar las decisiones nosotros", ha asegurado Rull.
Primeros movimientos del Estado
Con todo, Rull ha asegurado que el Govern estará "muy encima" de las propuestas del Gobierno español para analizar si se cumplen o no. El viernes pasado se celebró la primera reunión de la comisión de seguimiento sobre este tema y se acordaron unos tiempos estándar máximos, tanto de llegada como de salida.
Asimismo, el Estado prometió incrementar los efectivos policiales y el material necesario para agilizar la situación. "La primera prueba de fuego, que era este domingo pasado, se ha superado, pero estaremos muy encima de ello", ha advertido Rull.
Justamente este viernes se hará la segunda reunión, puesto que en el primer encuentro se acordó que se reunirían semanalmente.