La propuesta de un acuerdo de la claridad hecha por el president Aragonès es papel mojado. Al menos así lo ha querido poner de manifiesto la CUP en su turno en el debate de política general en el Parlament de Catalunya. "La Moncloa no ha tardado ni treinta minutos en descartarlo", ha ironizado la diputada Eulàlia Reguant, que ha recordado que, en estos momentos, la solución no pasa por el marco español, sino por el marco internacional. En el terreno social, los anticapitalistas también se han situado en la oposición, deshaciéndose de la etiqueta de socios prioritarios que les quieren colgar desde Sant Jaume. Los anticapitalistas consideran coyunturales e insuficientes las medidas anunciadas, ha cargado contra el discurso "autocomplaciente" del jefe del Govern por parecer "propio de un dirigente de la patronal" y ha censurado la disputa entre ERC y Junts, que sólo ven como una pugna por la hegemonía. El president Aragonès ha evitado el choque con los cuperos.
Eulàlia Reguant ha sido clara ante la propuesta "amplia" para la autodeterminación hecha por Pere Aragonès. Se ha aferrado a la misma respuesta de La Moncloa para aguarla: "La mesa de diálogo se demuestra inútil en este momento político. A falta de incentivos para abordar los aspectos nucleares del conflicto, ha quedado reducida a una bilateral ERC-PSOE con resultados pobres". Un reproche parecido al del diputado Carles Riera en la réplica: "La mesa ha fracasado. Levántese y dé por acabado este desacierto". Hecha la crítica a las "propuestas retóricas", la diputada anticapitalista ha asegurado que ni ellos ni nadie tiene "fórmulas mágicas". Pero ha dejado claro que la solución "en ningún caso" pasará por el marco del Estado español. "Tendrá que ser en el marco internacional. Tiene que dejar de ser un conflicto interno para pasar a ser un conflicto internacional", ha justificado en este sentido, pidiendo sincronizar el camino con Escocia e Irlanda. Y ha instado a "cocinar una nueva estrategia" que permita "recuperar la iniciativa política".
La CUP hace semanas que denuncia que detrás de los reproches entre ERC y Junts sólo hay humo. Y en eso ha insistido Eulàlia Reguant, que ha lamentado que sólo se trata de una "batalla partidista por la hegemonía", una "pugna partidista por las cuotas de poder" que les "avergüenza". Y ha aprovechado para situarse a la oposición, a pesar de los esfuerzos del Govern por incorporarlos. En este sentido, Reguant ha denunciado que "rápidamente guardaron el acuerdo con la CUP en un cajón a pesar de se llenen la boca que somos un socio prioritario".
"Dirigente de patronal"
Si en el terreno nacional no han encontrado camino compartido, tampoco en las medidas para hacer frente a la subida desbocada de los precios. Eulàlia Reguant ya ha arrancado su turno denunciando que Aragonès se ha olvidado de hablar de los desahucios y criticando la "autocomplacencia" del presidente de la Generalitat. Y ha considerado las medidas anunciadas un simple parche, sin ninguna transformación: "Ha pronunciado un discurso más propio de un dirigente de la patronal que de un president de la Generalitat. Hemos visto golpes de cheque y anuncios, pero ningún horizonte de cambio ni ninguna medida transformadora". Ha hecho suya la expresión de Anna Gabriel: "Si la avaricia infinita de unos pocos nos deja las neveras vacías, nos tendremos que comer a los ricos. Si nos echa de caso, nos tendremos que comer a los ricos. Y eso no ha hecho más que empezar".
Por todo eso, los anticapitalistas han adelantado que presentarán en este debate una "batería de propuestas de resolución con mínimos para cambiar esta situación". Unas resoluciones que contemplarán desde el horizonte nacional hasta la recuperación de soberanía o la nacionalización de sectores estratégicos, con una banca, una energética o una farmacéutica públicas.
Contra la extrema derecha
Este miércoles tendrá lugar, en el Tribunal Supem, el juicio a Eulàlia Reguant por no responder a las preguntas de Vox durante el juicio del procés. Y la diputada ha aprovechado para denunciar no sólo la presencia de la extrema derecha en el hemiciclo, que hoy ha vuelto a liderar el discurso racista, sino también su influencia: "La normalización del fascismo también es comprar su marco. Y su gobierno está en la línea fina de comprar el marco". Reguant ha aprovechado para expresar apoyo a las diputadas Basha Changue (CUP) y Najat Driouech (ERC), que "llevan semanas recibiendo el acoso y el insulto de la extrema derecha". Y para recordar el apuñalamiento racista de este fin de semana en Santa Coloma de Farners.
Aragonès evita el choque
En su réplica, el president Pere Aragonès ha intentado evitar el choque con la CUP y centrarse en aquello "que los une o los puede unir". En este sentido, les ha preguntado: "El Acuerdo es una propuesta sincera, no para pasar el tiempo. ¿Es criticable? Seguro. ¿Tiene lagunas? Probablemente. ¿Pero en comparación con qué propuesta alternativa concreta?". Y el jefe del Govern ha añadido: "No estoy jugando a hacer ver que ustedes avalan mi estrategia de negociación. Sé que no la avalan. Pero creo que tenemos que tratar de poder trazar este camino compartido con una lectura compartida que no nos lleve a la parálisis. Por eso no dejaré de hacer propuestas. Y le vuelvo a tender la mano, creo que en algunos ámbitos nos merecemos explorar qué caminos comunes podemos encontrar". Les ha vuelto a pedir apoyo para avanzar en la legislatura.