La victoria del Partido Popular, el sorpasso fallido de Podemos en las elecciones españolas del 26-J y de rebote la aparente imposibilidad de los comunes catalanes para pactar un referéndum con el Estado, parece que ha embravecido a las fuerzas independentistas, que ven en este Estado "irreformable" una oportunidad para empujar el procés y poner los puntos sobre las íes. Y eso es lo que quiere hacer a la CUP esta tarde en un acto en la plaza del Rei de Barcelona, donde emplazará directamente al Govern, y a las fuerzas políticas, a trabajar por el referéndum unilateral de independencia (RUI), según han explicado fuentes de la formación a El Nacional.
Es en este escenario, libre ya de citas electorales por el medio, donde coge fuerza la figura del RUI. Todo, para volver a encarar el timón independentista con la vista puesta en la cuestión de confianza del president Puigdemont en septiembre. Un aprieto que se podría pasar fácilmente si antes se llegara a un acuerdo, básicamente entre JxSí y la CUP.
Precisamente, la formación anticapitalista celebra esta tarde una conferencia política con los diputados Benet Salellas y Anna Gabriel al frente con un claro objetivo, emplazar al president de la Generalitat y a las fuerzas políticas tanto las independentistas como las partidarias del derecho a decidir, a trabajar conjuntamente en este RUI de manera que sea vinculante y pueda situar la cuestión catalana en la agenda internacional. En parte, se trata también de poner contra las cuerdas a CSQP y los comunes de Ada Colau para que se posicionen claramente, después de su estancamiento electoral.
Fuentes de la formación anticapitalista apuntan que hay que definir cómo será el punto final del procés, el momento exacto de ruptura, después de la aprobación de las tres leyes de desconexión. Y defienden que una manera de hacerlo sería mediante este RUI, y todavía más, ante un contexto europeo que podría afrontar varios referéndums como el de independencia de Escocia o el de la reunificación de Irlanda del Norte. Y eso, les obligaría a incluir también la cuestión catalana en su agenda.
En la asamblea nacional de Esparreguera, la militancia de la CUP aprobó defender la celebración del referéndum unilateral antes de enero del 2017. No obstante, esta fecha es variable, según estas mismas fuentes. La idea es que el RUI sea "la traca final" de esta legislatura excepcional de 18 meses.
De hecho, hoy por hoy también la Assemblea Nacional Catalana (ANC) parece comprar esta opción. De momento, el 15 y 16 julio celebrará una consulta interna para decidir si reclama a las instituciones catalanas la celebración del RUI. Mientras tanto, sin embargo, la entidad independentista tuiteaba una serie de argumentos para defender esta fórmula dentro de la hoja de ruta de JxSí y como se tendría que llevar a cabo. Remarcando, eso sí, la necesidad de que sea vinculante.
En este último punto coincide Esquerra Republicana, como explicó la misma secretaria general Marta Rovira en un comida-coloquio de la plataforma Sobirania i Justícia. La republicana condiciona el RUI a estar seguros de cuál será la afectación al día siguiente de su celebración.