El poder judicial ha dado un golpe de efecto días antes del 1-O y de conocer la sentencia del juicio al procés. La Guardia Civil ha detenido a 9 personas acusadas de terrorismo, tenencia de explosivos y rebelión por la Audiencia Nacional y la Fiscalía va a máximos de nuevo.
Los acusa de tener un "avanzado grado de preparación de proyectos terroristas con finalidad secesionista". Por eso, de hecho, una vez acaben todos los registros de la Guardia Civil, los trasladará directamente a la Audiencia Nacional donde mañana tendrán que declarar.
Según informa el ministerio público durante la operación se ha requisado "abundante documentación y material informático". Y además "se han localizado material y sustancias, consideradas precursoras para la confección de explosivos, susceptibles de ser empleadas en la fabricación de artefactos explosivos y para ser utilizadas contra objetivos seleccionados por un grupo de militantes de los CDR".
La fiscalía afirma que tiene la "certeza" de que las "acciones se iban a perpetrar aprovechando el periodo comprendido entre el aniversario del referéndum ilegal de autodeterminación del 1-O de 2017 y el anuncio de la sentencia del juicio del procés". Y que por eso se ha decidido "proceder a la detención de los implicados para abotar el proyecto que podría haber ocasionado daños irreparables debido a lo avanzados que estaban los preparativos".
La operación continúa abierta, bajo secreto de sumario y no se descarta que se puedan realizar más detenciones.
Ahora hay 9 detenidos en Sabadell, en Mollet del Vallès, en Santa Perpètua de Mogoda, en Sant Vicenç de Torelló y en Cerdanyola. Se han efectuado 10 registros.