La Fiscalía de Madrid ha pedido siete meses de prisión a la líder del colectivo de extrema derecha Hogar Social Madrid, Melisa Domínguez. Se le acusa de un delito de desobediencia o resistencia a la autoridad al irrumpir en la sede del PSOE en enero de este 2020, en el marco de una protesta.
En la sede del PSOE
Los hechos tuvieron lugar en la sede del PSOE en Madrid, después de que la policía desalojara el colectivo Hogar Social Madrid que okupaba una antigua sede de las Comisiones Obreras, en la calle Cristino Martos. Los integrantes del colectivo de ultraderecha, entre ellas Domínguez, se acercaron a la sede del PSOE en la calle Ferraz para protestar en contra de la actuación policial.
Desalojada a la fuerza
Según el auto, se sentaron con una pancarta donde se podía leer: "Mantenerse en pie en un mundo en ruinas". Impidieron el acceso a las entradas del edificio. Aunque la seguridad del PSOE les pidió su retirada, no acataron las órdenes y tuvo que venir la Policía Nacional.
Los agentes consiguieron que casi todos los activistas de extrema derecha abandonaran el lugar, Melisa se quedó y "persistió en su negativa, obligando a que los policías la desalojaran de una forma forzosa,"
No es el único juicio
Este no es el único procedimiento judicial que tiene abierto la portavoz de la organización de extrema derecha nacionalista. En diciembre será juzgada por un delito de incitación al odio para atacar a una mezquita, los hechos ocurrieron el 22 de mayo de 2016 después de los atentados yihadistas de Bruselas. También, unos meses antes, tendrá que declarar el 5 de julio por su actuación en una de las caceroladas contra el Gobierno, convocadas a la calle Ferraz el mes de mayo de 2020.
Exaltación de odio
Hogar Social Madrid también fue denunciado para exaltar el odio hacia confesiones religiosas. La exaltación se produjo durante una manifestación en el centro de Madrid donde se reunieron centenares de ultras bajo el lema: "Españoles sí, refugiados no". Los integrantes de la protesta cargaron contra grupos concentrados en los alrededores, también mostraron carteles e imágenes contra los refugiados y los inmigrantes.