ÚLTIMA HORA | Sigue el minuto a minuto del conflicto Rusia - Ucrania
La invasión de Rusia en Ucrania ha impregnado toda la actualidad y las estimaciones electorales no han sido una excepción. La gestión de Pedro Sánchez del conflicto que preocupa en toda Europa le está sirviendo para sacar a más votantes y consolidarse como primera fuerza, según la encuesta de IMOP-Insights para El Confidencial. Desde hace semanas los socialistas mantienen una tendencia ascendente, muy marcada por la crisis interna en el PP, la cual ya fue un revulsivo para las expectativas electorales del PSOE. Ahora, este primer impulso por la guerra interna de los populares se ha visto consolidado por el posicionalmente socialista ante el conflicto ucraniano. Si las elecciones se celebraran en este momento, Sánchez conseguiría 113 escaños, 7 menos que el año 2019. Puede parecer una mala noticia para el partido, pero se trata de uno de los resultados más próximos a las últimas elecciones que han obtenido en un sondeo desde estas.
Los socialistas se quedarían en poco de repetir los resultados del 2019 y congregarían uno 27,7% de los votos totales. Según la encuesta, Sánchez recuperaría partes de los votantes que había ido perdiendo desde los últimos comicios motivados por su firmeza en la guerra en Ucrania, mientras que su socio de gobierno se hunde por su ambigüedad con respecto a la misma. El rechazo a enviar ayuda militar en Ucrania y el perfil bajo de las principales figuras de Podem, como Yolanda Díaz, han vertido a la formación a unos malos resultados. El partido naranja pasaría de 35 escaños a 24, uno de sus peores resultados en sondeos. Agruparían solo el 10% de los votos y la fidelidad de sus votantes pasa del 66% a 55%, beneficiando directamente al PSOE. De las dos posiciones que han tomado los socios del Gobierno respecto de la guerra hay una clara ganadora para los votantes: la socialista.
Vox pisa los talones al PP
La derrota interna del PP también es un factor clave para comprender la mejora en las encuestas de los socialistas. A pesar del nuevo liderazgo de Alberto Núñez Feijóo las heridas de la guerra interna de los populares todavía son papables a los sondeos. No sólo se beneficia el PSOE de esta estocada, sino también Vox. En unos comicios ahora el PP mejoraría su resultado del año 2019, pero no tanto como en encuestas anteriores. Los populares pasarían de 89 a 91 escaños, concentrando el 22,2% de los votos. Hace solo unos meses la formación parecía consolidada como futura primera fuerza, superando de lejos los 100 escaños, ahora sólo sumaria dos más.
La crisis del PP es una gran oportunidad por Vox que sigue consolidándose como la tercera fuerza del hemiciclo del Congreso de los Diputados. Si nos fijamos sólo en el número de diputados, la formación de extrema derecha capitaneada por Santiago Abascal todavía está lejos de los populares, consiguiendo a 71 diputados, 19 más que en el 2019. Pero analizando la intención de voto se puede ver cómo Vox y el PP están casi empatados. Los populares concentran un 22,2% de los votos delante del 20% de la extrema derecha, unas cifras nunca antes registradas que exponen como se están fortaleciendo el partido de Abascal. El crecimiento de Vox también se ve en la repartición territorial del voto, donde la formación de extrema derecha supera en el PP en 19 provincias, incluyendo Barcelona, Girona y Tarragona.
Estabilidad a los partidos catalanes
Con respecto a la representación de las formaciones catalanas hay pocos cambios. Tanto Esquerra Republicana de Catalunya como Junts per Catalunya, revalidan sus resultados del año 2019 con 13 y 8 escaños, respectivamente. La única novedad vendría de la mano de la CUP que sumaria un diputado a sus filas, llegando a los tres.