La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha cargado con contundencia contra los tres partidos que este jueves han promovido la suspensión de sus derechos y deberes parlamentarios y la han apartado del cargo después de que se le haya abierto juicio oral por prevaricación y falsedad documental por su gestión al frente de la Institució de les Lletres Catalanes. Borràs ha reconocido que su suspensión le comporta una "frustración personal", pero ha asegurado que no se rendirá. Y aparte de no rendirse, ha querido poner el foco sobre los "cinco diputados" que la han suspendido, en referencia a los representantes en la Mesa del PSC, ERC y la CUP: "El mismo día que accedí a la presidencia expresé la voluntad de hacer desacomplejadamente una defensa de los derechos de los diputados. Ahora me lo impiden diputados vestidos de jueces hipócritas que me han aplicado un artículo que sabían que me podían aplicar para apartarme políticamente".
🔴 Laura Borràs, suspendida como presidenta del Parlamento | DIRECTO
A pesar de esta decisión, Borràs, como lleva diciendo desde el inicio de este proceso, ha prometido que no dimitirá ni dará ningún paso al lado para permitir una sustitución en su cargo, porque considera que no se tiene que dar una apariencia de normalidad a la cámara: "Manteniéndome en mi sitio, además de defender mi inocencia, fuerzo una situación de interinato", ha dicho la líder de Junts, avisando así que no permitirá que ninguna persona la sustituya mientras dure el proceso judicial: "No me rindo ni me rendiré ante ningún tribunal, seguiré luchando desde la suspendida presidencia de este Parlament hasta ver Catalunya libre", ha dicho visiblemente enfadada.
Borràs, que no ha participado de la Mesa del Parlament donde se ha tomado la decisión de suspenderla para no incurrir en un conflicto de intereses, ha prometido no renunciar, ni doblarse en el camino hacia la independencia, y ha acusado a los "compañeros de viaje", en referencia a ERC y la CUP, de trabajar con la única expectativa de la autonomía y solo pensando en el "partido". Ante el hecho de que dos partidos independentistas la hayan suspendido, ha dicho que eso demuestra la debilidad del independentismo: "Es una injusta decisión que hace daño a la democracia y al conjunto del independentismo. Es una señal de que la represión hace su trabajo y tiene sus efectos. Hasta ahora quien ponía presidencias era la ciudadanía y las sacaba el 155, desde ahora ya no", ha sentenciado.
Borràs reivindica su tarea
Se ha autoproclamado como la "primera presidenta" sin tarjeta de crédito, que no cobra dietas, y que mira siempre por los derechos públicos, y ha criticado ahora ser suspendida por un "artículo infame que vulnera los derechos fundamentales y que genera inseguridad jurídica". Así, ha considerado que ERC y la CUP han participado de una guerra sucia para atropellarla democráticamente, unos hechos que se han producido en el mismo día que su Parlament ha permitido la participación telemática de Lluís Puig en una comisión, ha querido remarcar.
"La mejor manera de defender mi inocencia es dando solo pasos adelante en la lucha contra la injusticia que supone verme abocada a un juicio de unos delitos que no he cometido. Tengo la absoluta conciencia que se ha debilitado la institución a conciencia dejándola desprovista de presidencia. Pero continúo firme y determinada a seguir luchando", ha dicho después de declararse una vez más inocente de los hechos que se lo acusan por su gestión al frente de la Institució.