La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha hablado por primera vez en público sobre la polémica de que rodea el diputado a Francesc de Dalmases y lo ha hecho para defenderlo y asegurar que los hechos relatados no se corresponden con la realidad. El diputado de Junts se ha visto esta semana cuestionado por haber tenido una actitud intimidatoria con una periodista de TV3 a quien abroncó después de una entrevista a la presidenta del Parlament en el programa FAQS, según destaparon NacióDigital y ElDiario.es. Según Borràs, sin embargo, lo que se dice que pasó es "una cuestión bastante diferente". "Yo estaba cuando pasó", ha dicho Borràs en una entrevista en el programa 'Aquí Parlem' de RTVE, y ha criticado un ensañamiento contra el diputado.
"Lo que he leído que ha pasado yo no lo he vivido. Estamos hablando de una agresión que no ha tenido lugar. Lo que me parece lamentable es ver la manera como se produce un ensañamiento", ha cargado Borràs, que ha criticado que parezca que todo el mundo "lleva un fiscal dentro" cuando no saben "qué paso", a pesar de que diversos testigos aseguraron los hechos. Además, la presidenta ha puesto en valor la manera de proceder de Dalmases, después de haberse apartado temporalmente de la presidencia de la comisión que investiga la CCMA y haber pedido al partido que le abra un expediente informativo "para poder rebatir todas las informaciones difamatorias que se han hecho", ha dicho la presidenta.
La actitud de Dalmases, que han condenado varios organismos como la misma CCMA, irrumpió el miércoles en el pleno del Parlament durante el debate de una moción que defendía al diputado de Junts. Entonces se autodeclaró víctima de un linchamiento, aunque reconoció haber tenido una conversación "encendida" con la periodista, si bien rebajó que fue con una persona que ama y que admira, sobre temas estrictamente periodísticos.
Las declaraciones hechas hasta ahora por Dalmases y su decisión de apartarse de portavoz de la comisión de la CCMA no han sido suficientes para los partidos de la oposición. Incluso cuatro grupos, el PSC, ERC, CUP y comuns, han enviado una carta conjunta a Borràs instándola a iniciar un procedimiento "para determinar si este diputado ha vulnerado el código de conducta del Parlament de Catalunya y a emprender las acciones pertinentes en caso de que se confirme que así ha sido". Estas acciones, según el reglamento del Parlament, pueden ir desde una suspensión hasta que se resuelvan los hechos o incluso multas de entre 600 y 12.000 euros. Además, también han instado a la Mesa a llevar el caso a la comisión del estatuto del diputado.