Cuando todavía no ha empezado la intervención de Vox, el letrado de la acusación popular Pedro Fernández ya ha puesto el dedo en la llaga y ha pedido que Jordi Sànchez se saque el lazo amarillo porque es un claro símbolo ideológico.
Y el presidente de la sala ha intervenido rápido diciendo que el tribunal "se hace suya la doctrina del TEDH que tiene dos precedentes en sentencias de Bosnia y Bélgica de diciembre del 2018, donde se resuelve que se permiten los símbolos ideológicos o religiosos".
"La sala no pondrá ninguna objeción a que lleven ningún símbolo ideológico", ha dicho Marchena.
Javier Ortega, el otro abogado de Vox, estuvo ayer durante toda la sesión luciendo la bandera española en un brazalete de la mano izquierda. Hoy, sin embargo, no la llevaba.
Vox ha hecho una intervención corta y técnica, y menos agresiva de lo que se esperaba. Una vez se han estrenado en el juicio reclamando que le saquen el lazo amarillo a Sànchez, el resto ha sido de poco interés y reiterativo.
Pedro Fernández ha expuesto que "no ha habido vulneración de los derechos de los acusados", ni que "tampoco ha existido, en ningún caso, la vulneración del derecho a un juicio imparcial". También ha dicho que "la presencia del Rey en esta sala no es pertinente" y ha recordado la inviolabilidad del Rey y ha asegurado que no puede ser testigo en este procedimiento.
Pedro Fernández ha criticado la sentencia del tribunal alemán que decidió no extraditar a Puigdemont ni lo acusó de rebelión.
Vox ha cerrado la segunda sesión. El tribunal se cierra a deliberar y convoca a todo el mundo para mañana a las 10h. Primero expondrá cómo resuelve las cuestiones previas y después empezarán las declaraciones con Oriol Junqueras.
Mira aquí la intervención completa de Pedro Fernández: