Sorprendido, así es como se ha quedado el diario francés Le Monde después de la intervención de este viernes del presidente del Gobierno , Mariano Rajoy, durante la junta directiva del PP catalán en Barcelona. En un artículo titulado "Mariano Rajoy da un puñetazo en la mesa en Barcelona... en un hotel", el medio explica que el popular quiso hablar en "un hotel situado al final de un muelle del puerto de Barcelona y protegido por una barrera de policías", donde lanzó un mensaje de serenidad y firmeza a los catalanes para decirles que no habrá referéndum.
Según Le Monde, todo eso lo hizo para evitar que su conferencia se pudiera entender como un acto de campaña para el 'no' al referéndum que intenta paralizar y subraya que "ni Barcelona ni Catalunya son tierras acogedoras para Rajoy, ya que cuenta con menos de un 10% de votos y no son más que la sexta fuerza política".
Por otra parte, el diario destaca que solo había "unas decenas de militantes de edad avanzada" y que el presidente español estaba "visiblemente tenso", porque lanzó la advertencia de que no le obligaran a hacer lo que no quería hacer.
Finalmente, aseguran que Rajoy aprovechó la ocasión "para agradecer el trabajo de la Guardia Civil delante de sus fieles, mientras precisaba que se habían requisado 100.000 carteles y mientras anunciaba que Madrid podría tomar el control de las finanzas catalanas para que no destinen ni un euro público al referéndum". Para contextualizar, Le Monde expone que el día 14 de septiembre, el vicepresident de la Generalitat, Oriol Junqueras, anunció que no enviaría más listas de gastos de la Generalitat al Gobierno. Como consecuencia, Rajoy le respondió que si en 48 horas no demuestran que respetan la ley, será el Estado el que se encargará de asegurar la financiación de la Generalitat.