El derecho a decidir, y, en consecuencia, el referéndum o consulta para que la ciudadanía catalana pueda decidir su futuro político, quedarían fuera de la reforma de la Constitución que ha empezado a poner sobre la mesa el gobierno del socialista Pedro Sánchez.
Así lo ha asegurado la ministra de Administración Territorial y Función Pública, Meritxell Batet, quien, en una entrevista a RNE ha afirmado este lunes que introducir el derecho a decidir en una propuesta de reforma constitucional no entra en los planes del Gobierno: "No contemplamos esa posibilidad como no la contemplan la mayoría de las constituciones del mundo", ha sentenciado. Este fin de semana han abundado las declaraciones de miembros del gobierno español que evidencian un auténtico pánico a la celebración de un referéndum a la escocesa para resolver el conflicto.
El referéndum es, pues, la línea roja del diálogo que se proponen iniciar los gobiernos español y catalán y que tendrá su primera concreción en la próxima cita entre los presidentes Sánchez y Quim Torra, cuyo desarrollo y contenidos han empezado a preparar la ministra Batet i la consellera de Presidència i portavoz del Govern, Elsa Artadi después del contacto telefónico que se produjo el viernes pasado entre ambos jefes de gobierno.
45 de los 46 puntos de Puigdemont
El nuevo gobierno del PSOE acepta el diálogo sobre 45 de los 46 puntos que presentó en abril de 2016 Carles Puigdemont a Mariano Rajoy -y que doblaban los que planteó Artur Mas en julio de 2014- pero excluye el punto 46, referido a la autodeterminación.
Batet ha defendido una reforma constitucional fraguada en la comisión del Congreso que analiza el modelo territorial, un espacio donde a su juicio, es "importante que comparezcan expertos" para hacer un "análisis serio y riguroso" de la situación y que exista "voluntad de los partidos políticos" porque "sin consenso no se va a reformar nada" y "no se puede avanzar".
Para Batet, la reforma es necesaria porque "la crisis territorial no ha hecho más que crecer" en los últimos años, "en gran medida porque el gobierno de España negó la existencia de la crisis y la posibilidad de buscar soluciones o hacer política" y ahora "es el momento".
Leyes orgánicas para reactivar el Estatut
En cuanto a la posible negociación con Catalunya, Batet ha apuntado la vía de las leyes orgánicas para recuperar artículos del Estatut que en el 2010 fueron tumbados por la sentencia del Tribunal Constitucional, un viejo planteamiento del PSC. La ministra sostiene que esos artículos fueron declarados inconstitucionales "no por el contenido sino porque el Estatuto no era la norma adecuada para regular la materia" y ha explicado que algunos de ellos versan sobre leyes orgánicas del Estado como la del Poder Judicial.
"Ahí hay margen para trabajar, es verdad que afecta a leyes orgánicas, y que cuando nos planteamos modificar este tipo de leyes hay que hacerlo desde el punto de vista del consenso y de acuerdos muy amplios, porque no son leyes que se puedan ir modificando al albur de una mayoría coyuntural, es bueno que respondan a un sentimiento mayoritario y transversal", ha apostillado.
La posición de ERC y el PDeCAT
Mientras tanto, ERC y PDeCAT han aprovechado las comparecencias de prensa posteriores a las reuniones de sus órganos directivos para marcar territorio ante un diálogo con Sánchez. La portavoz de ERC, Marta Vilalta, ha señalado que la posición de su partido es de "diálogo y negociación sin renuncias ni condiciones". Se debe poder hablar de todo, este es "el reto que lanzamos al presidente Sánchez", ha dicho. "Nuestro punto de partida es la defensa del país, el 1 de octubre y del derecho a la autodeterminación", ha añadido.
También la portavoz del PDeCAT, Maria Senserrich, afirmó que el "punto de partida" de su partido es "el 1-O y el 21 de diciembre de 2017" y que no les encontrarán en propuestas del "78, del 2006 y de épocas pretéritas ", en alusión a la propuesta de reforma de la Constitución de la ministra Batet. "Nosotros queremos respuestas a las realidades actuales, estamos en el 2018", ha insistido Senserrich en la rueda de prensa posterior a la reunión de la dirección ejecutiva del PDeCAT.