Como ya es habitual en el Tribunal Supremo con los nombres que no son castellanos, el juez Manuel Marchena se ha hecho un lío con el nombre del diputado de ERC, Ruben Wagensberg, que ha sido incapaz de pronunciar. La situación a rozado la ridiculez.
Al citar el nombre del testigo, que comparecía a petición de la defensa, Marchena sólo ha acertado el nombre de Ruben. "Llamamos a testificar a Ruben Gobenserber (sic), o algo parecido", ha soltado el juez. Después, para evitar más problemas, lo ha tratado como "Don Ruben".
Se desconoce qué sucedería si Marchena se comprara un día un Volkswagen.