Esta mañana, han llegado los cadáveres de los dos periodistas asesinados en Burkina Faso, David Beriáin y Roberto Fraile. Los féretros de los dos reporteros han aterrizado a las 9h en un avión del ejército del aire desde Ouagadougou, la capital burkinesa, en la base aérea de Torrejón de Ardoz, Madrid, donde las ministras de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, y la de Defensa, Margarita Robles, les esperaban a pie de pista. Los familiares también estaban pero tan sólo ha hablado un portavoz de ellos ya que el resto no han podido desplazarse hasta la pista.

Llegada de los féretros / Fuente: EFE

Al lado de los dos periodistas españoles, también había el cuerpo del ciudadano irlandés asesinado, Rory Young, cofundador de la ONG Chengeta Wildlife, dedicado a combatir la caza furtiva, y que se encontraba con ellos en el momento del ataque al este de Burkina Faso.

Para recibir sus restos, estaba presente la embajadora de Irlanda a España, Sile Maguire. Los féretros de los tres muertos han sido recibidos por un cordón militar de honor y transportados a hombros por veinte soldados del Ejército del Aire.

El discurso de Robles

La ministra Robles ha dedicado su discurso, en su mayor parte, a la tarea de los militares españoles. Si bien ha dado las gracias a los periodistas porque "no conocen ningún tipo de frontera", ha tirado de discurso patriótico: "Los trámites se han hecho lo más rápido posible y agradecer al ejército del aire que se ha movilizado para que hoy, los cuerpos tan amados, puedan estar con sus familias".

También ha sumado el agradecimiento al CNI: "En un mundo globalizado, lo que pasa en el Sahel importa, tenemos que seguir trabajando pero haciendo una mención muy especial al Centro Nacional de Inteligencia, que está presente en la zona y mantiene relaciones con los otros países, también de la UE".

Robles i Laya en la pista de aviones de Torrejón de Ardoz, Madrid / Fuente: EFE

Robles concluye: "Cuando un español muere o es asesinado, somos asesinados todos". Además, ha subrayado que sin los militares, toda la tarea de repatriación no hubiera sido posible: "La tripulación del aire ha llevado a nuestros hermanos y el compañero irlandés que estaba en la zona". También se ha comprometido a trabajar con el gobierno de Burkina Faso para encontrar a los asesinos de los dos periodistas y ha constatado que "lo que pasa en el Sahel importa a Europa". Sin embargo, hay que recordar que ya se hizo llegar el comunicado de un grupo yihadista que asumía el asesinato, y formarían parte del Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), la filial de Al Qaeda en el Sahel.

La zona del Sahel

Francia, Alemania e Italia también se han comprometido este viernes a reforzar su apoyo en la lucha contra el terrorismo y para la seguridad y desarrollo. Junto con el Estado español, han publicado una declaración conjunta que la lucha contra el terrorismo, los tráficos ilícitos y todas las formas de violencia "constituye un objetivo esencial para garantizar el estado de derecho y la coexistencia pacífica de los sahelianos".

Así, han puesto de manifiesto las "persistentes amenazas en la seguridad y los complejos desafíos socioeconómicos en la región del Sahel, que reclaman respuestas urgentes" y por eso han acordado subrayar su compromiso para reforzar el apoyo "en el marco de una aproximación transversal que una seguridad, gobernanza, estabilización y desarrollo".

Según la declaración, están convencidos que para alcanzar un Sahel seguro, estable y próspero, el enfoque de seguridad no es suficiente y tiene que ir acompañado de medidas de ayuda humanitaria, estabilización y desarrollo económico y social, centrándose particularmente en la educación, la salud y el acceso a servicios básicos para toda la población en la integridad del territorio. Por eso, han reafirmado su determinación para seguir trabajando en estrecha cooperación con los países de la región y el G5 Sahel, en el marco de la Coalición para el Sahel, la Alianza Sahel, el Partenariado para la Seguridad y la Estabilidad al Sahel (P3S), y otras iniciativas regionales.

 

Fotografía principal: varios militares llevan a hombros los féretros con los restos mortales de los periodistas David Beriáin y Roberto Fraile y del irlandés Rory Young.