El conseller de Interior, Joan Ignasi Elena, ha comparecido este miércoles en el Parlament para intentar aclarar los motivos del cese del comisario jefe Josep Maria Estela hace ahora una semana. Pero, en lugar de recibir la aprobación de los grupos parlamentarios, sus argumentos no han satisfecho y la oposición en bloque se ha encargado de dejarlo escaldado con una dura lluvia de reproches que ha abrazado todo el espectro político. En su comparecencia a petición propia ante la Comisión de Interior, Elena ha justificado la destitución de Estela por las "diferencias constatadas" entre el jefe del cuerpo y la dirección de la conselleria, asegurando que se quería apostar por una Jefatura más coral y que el "ritmo de feminización" que quería impulsar Interior había chocado con el ritmo de Estela. Unas palabras, pues, que vienen a indicar este como el único motivo que ha obligado a promocionar a Eduard Sallent como jefe del cuerpo.
Pero los partidos no han comprado este razonamiento. Ha sido el diputado del PSC, y exconseller de Interior, Ramon Espadaler, el primero a pronunciarse de esta manera. "Nosotros estamos comprometidos con la feminización y hemos intentado facilitar el acceso de las mujeres al cuerpo de los Mossos, pero no cuela que esta sea la razón por la cual ha tomado esta decisión", ha lanzado, acusando también a Elena de hacer un "muy flaco favor" a la causa de la feminización. Y la CUP, con quien los socialistas generalmente se encuentran en las antípodas en materias policiales, ha compartido también la valoración que no cuela el argumentario de Estela. Eso sí, Xavier Pellicer ha evitado rápidamente ninguna aproximación más a los socialistas: "Después no coincidimos en nada más de lo que han dicho".
También Junts se ha pronunciado en una línea similar, a pesar de que menos belicista, reivindicando la necesidad de trabajar para feminizar el cuerpo y la cúpula de los Mossos, pero rechazando que se utilice esta cuestión como "excusa" porque Elena releve Estela. "La feminización no pasa solo porque la comisaría en ninguno sea nombrada por el conseller en una operación de marketing", ha advertido Mercè Esteve. Y David Cid, de los comuns, ha manifestado el compromiso de su grupo con la feminización, pero lo ha avisado: "Lo que no tiene derecho es de desestabilizar el cuerpo de los Mossos".
Todas las críticas en paquete
La cuestión de la desestabilización ha estado, de hecho, un elemento central de la crítica de los partidos. Los diferentes grupos han empaquetado de este modo diferentes elementos y las han servido en frío al conseller. Así, sobre la mesa se ha situado los numerosos relevos de la cúpula de los Mossos en los últimos años. El PSC, por ejemplo, ha recordado que todo ello empezó con el cese de Josep Lluís Trapero, y después "se continuó interfiriendo en la Jefatura", y los comuns han dicho que Elena se ha equivocado en el anuncio del cese de Estela, como ya le pasó con Trapero: "Quizás no había que humillarlo, paseándolo por comisarías sin despacho".
El mismo David Cid ha aprovechado la oportunidad de hoy para reprochar el nuevo ejecutivo en solitario de ERC, puesto que en su primera semana ha suscitado la polémica de la policía catalana. "Esquerra Republicana no sabe gobernar ni con Junts ni sola", ha lamentado. El PSC no ha sido tan directo en este aspecto, pero Espadaler sí que ha querido acusar Elena de haber abierto "heridas" entre el cuerpo de los Mossos y reprocharle que no se plantee la opción de dimitir. "Y Pere Aragonès no se puede permitir el lujo de cesarlo, aún menos con un Govern en franca minoría". Junts, a pesar de estar falcado en la oposición, también ha limitado su ataque a remarcar los pocos apoyos de los republicanos. "Queda claro que no tiene el apoyo de la cámara porque no puede cumplir los acuerdos".
Injerencias policiales a la política
El momento estelar de la CUP ha consistido en criticar uno de los puntos concretos mencionados por Elena, quien en su discurso ha remarcado nuevamente que no permitirá injerencias policiales en las decisiones políticas. Los anticapitalistas han querido subrayar que durante muchos años los Mossos d'Esquadra se han opuesto con fervor a cualquier cambio interno que permita el control democrático real del cuerpo para continuar actuando con "impunidad". "Esto es el que tenía que explicar hoy, las razones reales del conflicto en el cuerpo de los Mossos. Ha dicho no permitir injerencias policiales en la política. ¿Las hay? ¿Quién las provoca? ¿Qué medidas se han hecho para pararlas?", ha preguntado Pellicer. Los comuns también se han sumado a esta línea discursiva para interrogar al conseller sobre las supuestas interferencias de los Mossos. "Es muy grave", ha sentenciado Cid.