Los editores de las revistas en catalán han plantado cara al veto del PP y Vox a cinco revistas en catalán de la biblioteca de Borriana, en Castelló. El presidente de la Associació de Publicacions Periòdiques en Català (APPEC), Germà Capdevila, ha anunciado que activarán la vía judicial para denunciar la censura. Además, ha detallado que presentarán una denuncia a las instituciones europeas y una queja formal en el Síndic de Greuges del País Valencià. Para luchar contra la censura que se está haciendo desde la derecha y la ultraderecha contra las revistas catalanistas, la APPEC también ha adelantado que facilitará la suscripción a las publicaciones "en todas partes donde actúe la censura" y estudia medidas de discriminación positiva de los títulos. Además, ha puesto un equipo legal a disposición de las publicaciones afectadas: Cavall Fort, Enderrock, Camacuc, El Temps y Llengua Nacional.
La rueda de prensa del APPEC ha contado con el apoyo de Òmnium Cultural y Plataforma per la Llengua. También ha asistido la consellera de la Presidència, Laura Vilagrà; la presidenta del Parlament, Anna Erra; y el secretario de Mitjans de Comunicació de la Generalitat, Oriol Duran; y el número tres de la lista de ERC en el Congreso en las elecciones del 23-J, Francesc-Marc Álvaro.
Medidas judiciales para las revistas en catalán
Capdevila ha tildado la retirada de las revistas de "asalto a la lengua" con el objetivo de eliminarla y lo ha comparado con la persecución del catalán en las dictaduras tanto de Primo de Rivera (1923-1930) como de Franco (1939-1975). "Nos preguntamos si nos tenemos que preparar para una nueva época oscura para la lengua", ha dicho. Asimismo, ha asegurado tener "una mala noticia contra todos los que quieren acabar con la lengua": "No podrán con nosotros. No desaparecemos. Al contrario, pondremos en marcha una serie de medidas para conseguir que el catalán y la cultura catalana sean más fuertes que nunca".
Con respecto a las medidas, el APPEC interpondrá una demanda civil para pedir la restitución de las publicaciones retiradas porque la ley no permite a un concejal retirar revistas de una biblioteca por su cuenta. Asimismo, presentará quejas ante la Unión Europea y el síndico del País Valencià —a la vez que pondrán un equipo legal a disposición de los grupos editores afectados.
Movilización contra la retirada
Lejos del ámbito judicial, la asociación se reunirá con el Gobierno y con todas las entidades a favor tanto de la protección como del impulso de la lengua catalana para coordinar las acciones. También se ha anunciado una primera movilización de rechazo a la retirada de las revistas para este lunes a las 19.00 horas delante de la biblioteca de Borriana. Finalmente, la APPEC lanzará la campaña de suscripciones mayor de la historia de la entidad —aunque no han querido dar detalles porque todavía se está ultimando con los diferentes grupos empresariales. "Poniendo un tuit contra Vox no solucionaremos el problema. Lo solucionaremos si la gente asume pagar 10 o 15 euros al año para pagar una revista en catalán", se ha limitado a decir Capdevila.
Por otro lado, el presidente de Plataforma per la Llengua, Òscar Escuder, también ha afirmado que se trata de un ataque que se ha apoyado en una estructura lingüística del Estado que discrimina al catalán. Su homólogo de Òmnium Cultural, Xavier Antich, ha tildado el ataque de "cruzada de la extrema derecha" contra la lengua y ha asegurado que atacarla "es atacar a todo un país". Finalmente, los editores de las revistas han mostrado su rechazo a Vox y han anunciado la itnención de perserverar en su actividad editorial. Es el caso de Llengua Nacional, cuya presidenta, Màriam Serra, ha aseverado que el ataque es "un globo sonda hecho en un pueblo pequeño para ver como responde a la sociedad y después hacerlo a mayor escala". Desde Cavall Fort, han agradecido el apoyo recibido este jueves.