Dos años y tres meses después del día D, el de la Declaración de Independencia del 27 de octubre de 2017, Oriol Junqueras, Jordi Turull, Raül Romeva, Joaquim Forn, Josep Rull y Dolors Bassa estan nuevamente en el Parlament de Catalunya. A su llegada han sido recibidos con todos los honores por las dos máximas instituciones del país, el president de la Generalitat y el del Parlament. Torra y Torrent han firmado una tregua fugaz después de la fractura motivada por la Junta Electoral Central.
La primera en llegar, a las ocho y cuarto de la mañana pasadas, ha sido Dolors Bassa, la exconsellera de Trabajo y Asuntos Sociales durante el gobierno Puigdemont. Tan pronto como ha cruzado la puerta principal de la cámara catalana, se ha fundido en un emotivo abrazo con Torrent. Después, lo ha hecho con Torra. Ha sido al llegar al pie de la escalera noble que ha estallado el grito de libertad de los diputados y trabajadores presentes. Ella venía de más lejos que el resto, de la prisión de Puig de las Basses, en Figueres.
Al cabo de diez minutos han desencochado ya a los hombres, provenientes del centro penitenciario de Lledoners. Al frente, Oriol Junqueras, el exvicepresident del gobierno durante el 1-O. Tras él, Romeva, Forn, Rull y Turull. La liturgia ha sido la misma. Sentida abrazada con Torrent y Torra.
Una vez dentro, se les ha acompañado a la sala de audiencias anexa al despacho del presidente del Parlament. Ahí pasarán todo el día. Uno a uno, se les irá llamando para comparecer a la comisión del 155. La previsión es que la intervención de cada uno de ellos se alargue alrededor de una hora y media. El primer turno es para Junqueras. Por la mañana intervendrán también Turull, Romeva y Forn. Rull y Bassa lo harán por la tarde. Según los cálculos, a la hora de la cena, todos estarán de nuevo en sus respectivas cárceles.
El traslado, orquestrado por el cuerpo de Mossos de Esquadra, se ha hecho bajo la máxima discreción posible, en vehículos sin logotipar, eso sí, de máxima seguridad. No ha baido manillas, pero los presos están custodiados en todo momento dentro del Parlament.