El grupo socialista del Europarlamento ha impulsado una enmienda a una propuesta sobre las relaciones con Rusia, que pide que se investigue si existen contactos entre este país y el independentismo catalán, y ha sido aprobada. La enmienda, que sigue la teoría conspirativa de la fábula rusa a partir de un informe de la Guardia Civil, señala que "las recientes revelaciones sobre contactos estrechos y regulares entre funcionarios rusos, incluidos miembros del servicio de seguridad, y representantes de un grupo de secesionistas catalanes en España requieren una investigación en profundidad".
A favor se han expresado los eurodiputados del PP, PSOE, Ciudadanos y Vox, mientras que han rechazado la enmienda los representantes de Junts, ERC, PNV y Unidas Podemos. Los verdes, en cambio, se han abstenido en bloque.
El socialista croata Tonino Picula, autor de la enmienda, ha afirmado que este caso "podría resultar ser otro ejemplo de injerencia rusa a los Estados miembros y de los constantes intentos de Rusia de explotar cualquier asunto que pueda promover la desestabilización interna de la Unión". De esta manera, el informe elaborado por el popular lituano Andrius Kubilius sobre la relación con Rusia, incluirá esta petición. El informe será aprobado este jueves en su totalidad y reclamará a la UE estar preparada para no reconocer las elecciones rusas del próximo 19 de septiembre, cuando se renueven los 450 escaños de la Duma estatal.
El informe pide que el bloque europeo tome esta posición "si las elecciones se reconocen como fraudulentas y que se han llevado a cabo violando principios democráticos y el derecho internacional", lo que Kubilius considera que está sucediendo en Rusia, donde el Kremlin "está destruyendo la competencia política, dejando sin posibilidades que haya unas elecciones justas."
Junts ha votado a favor del informe crítico con Rusia, elaborado por Kubilius, pero se ha opuesto a la enmienda socialista, porque ve una mano del Gobierno español para intentar relacionar el independentismo con teorías rusas. "Hemos votado a favor de este informe porque compartimos plenamente la preocupación por la injerencia de Rusia en la democracia de la Unión. No obstante, lamentamos la aprobación por parte del pleno de una enmienda a este informe (la enmienda 31 del grupo socialdemócrata) que pretende promover, por la puerta de detrás, una afirmación infundada sobre el movimiento independentista catalán Este es sólo el último de una serie de intentos por parte del Gobierno español, el Estado español (la policía y los servicios de inteligencia) y su prensa para impulsar una narrativa de supuestos vínculos entre el movimiento independentista y la inteligencia rusa. La enmienda sólo pretende tergiversar un movimiento democrático presentándolo como un instrumento destinado a desestabilizar la Unión Europea, para encubrir la implacable represión en la que está sometido y aislarlo de posibles aliados que puedan alzar su voz contra las violaciones de derechos fundamentales que España comete continuamente", ha indicado Junts en una nota.
Según este partido, la supuesta implicación de la inteligencia rusa en el procés independentista catalán "es una absoluta falsedad (o fake news)". "La invención proviene del cuerpo policial profundamente antiindependentista de la Guardia Civil y tiene su origen en el espionaje de mensajes privados obtenidos ilegalmente, cómo reconoce la Fiscalía española," ha añadido.
Ha pedido al Parlamento Europeo que se proteja de las noticias falsas.