Tres de las cuatro mayores ciudades del Estado tienen la llave para arraigar a Pedro Sánchez en el cargo de presidente del Gobierno. Si bien la semana pasada explicábamos cómo el PP podía ganarle la guerra al PSOE a través de los campos de batalla de las autonomías, los socialistas tienen posibilidades de anclarse en La Moncloa a través de Madrid, Barcelona y Sevilla. Con permiso de Valencia, estas tres ciudades son ahora mismo las más importantes del estado si se las observa en clave electoral; todo se debe a la relevancia que pueden tener en estos municipios los resultados de las elecciones municipales del 28-M.
Por descontado, no todo depende de estas tres grandes ciudades. El PSOE se presenta en estas elecciones con el marcador a favor suyo. Gobierna en 22 capitales de provincia, mientras que el PP lo hace en 12. Ahora bien, hay que señalar que los mejores cromos los tiene Génova. Los populares ostentan las alcaldías de Madrid, Zaragoza y Málaga. Mientras que la ciudad más importante que tienen los socialistas es Sevilla. También tienen en sus manos ciudades como Palma, Vigo o La Corunya, pero no son municipios tan preciados.
Madrid
Aunque en la anterior legislatura Madrid estuviera gobernada por Manuela Carmena, la capital española ha sido históricamente un feudo del PP. Desde 2019 el edificio de la plaza Cibeles está ocupado por la administración de José Luis Martínez-Almeida, pero existen posibilidades que eso deje de ser así a partir del 28-M. En este caso, sin embargo, no porque el PSOE le tome la alcaldía. Las encuestas apuntan que la izquierda madrileña pisa poco a poco los talones de los populares.
La situación es la siguiente: después de varios intentos fallidos del PSOE para conseguir la alcaldía de Madrid, este año se ha apostado por enviar un paracaidista proveniente de La Moncloa: la ministra de Turismo, Reyes Maroto. El problema es que se trata de una candidata muy desconocida, motivo por el que no es la preferida de los madrileños. De hecho, las encuestas señalan que la favorita de los partidos de izquierda es Rita Maestre, de Ahora Madrid. De momento, parece que la suma de esta formación y la socialista está muy empatada con la suma de PP y Vox. Y lo más importante: ciudadanos podría tener la llave, y fuera bueno no dar por hecho que entregaría sus votos a la derecha, después de que la nueva portavoz del partido, Patricia Guasp, ha reiterado durante el proceso de refundación de la formación naranja que el PP tiene que dejar de ser al socio preferente del partido.
Barcelona
Es altamente probable que la capital de Catalunya se convertirá en la ciudad más interesante de seguir en los próximos meses, con respecto al clima electoral. Hasta hace poco, Barcelona en Comú, Esquerra Republicana y el PSC estaban bien empatados en las encuestas. En las últimas semanas, ha irrumpido un nuevo actor: el exalcalde Xavier Trias quiere repetir como alcalde barcelonés, y se presenta con la marca de Junts per Catalunya. ¿De quién absorberá votos? ¿Del independentista Ernest Maragall? ¿Se convertirá en el voto útil anti-Colau? ¿Puede dividir todavía más el voto independentista y traducirse en una victoria de los comunes o de los socialistas?
Sea como sea, hay varias encuestas que indican que el PSC, de la mano de Jaume Collboni, sería tímidamente favorito en estos comicios. Pero la situación está bien empatada entre estas cuatro candidaturas. Para los socialistas, ganar en Barcelona podría traducirse en un premio por la manera que el Gobierno ha gestionado el conflicto político con Catalunya. Un recordatorio: aunque el independentismo alcanzara en las elecciones del Parlament de 2021 la mayoría del 52%, el PSC fue la lista ganadora de aquellos comicios. No hay duda: para Sánchez, ganar Barcelona significaría haber convencido a los catalanes y tenerlo muy fácil para prorrogar su estancia en La Moncloa.
Sevilla
Andalucía, el feudo más emblemático del PSOE, está hoy en día en manos del PP. En Ferraz todavía cuece la victoria de Juanma Moreno de este pasado verano, cuando arrasó con mayoría absoluta. No obstante, y aunque Málaga también esté en manos populares, la alcaldía de la principal ciudad, Sevilla, es de los socialistas. Antonio Muñoz quiere revalidarse en el cargo, y se presenta en las próximas elecciones con un encargo muy importante: demostrar que el PP no ha conquistado Andalucía del todo.
Si los populares ganaran Sevilla, el PSOE se presentaría a las elecciones generales de diciembre desangrándose en Andalucía. Y no es un escenario complicado de visualizar, porque las encuestas señalan que los sevillanos ven el PP con buenos ojos. Es por todo eso que buena parte de los esfuerzos de los socialistas tienen que concentrarse en Sevilla y Barcelona: una ciudad por miedo a perderla y la otra por la esperanza de recuperarla y legitimar la estrategia política en Catalunya.
Valencia, Palma, País Vasco y Galicia
También será interesante ver qué pasa en Valencia, ciudad gobernada hoy día por Compromís. Algunas encuestas pronostican que el 28-M la formación más votada en esta ciudad podría ser el PP, pero que las izquierdas sumarían más que las derechas y que, por lo tanto, la alcaldía no acabaría en manos de los populares. Si eso fuera así, la nueva alcaldesa sería la socialista Sandra Gómez, que quedaría en segunda posición. Mientras que la medalla de bronce sería para Compromís.
En Palma de Mallorca, en cambio, no hay claros vencedores. Aunque actualmente el alcalde es el socialista José Hila, las encuestas apuntan a un empate muy técnico entre las derechas y las izquierdas. Aunque el partido se encuentre en peligro de extinción, Ciudadanos podría tener la llave y hacer decantar la balanza hacia un lado o otro.
Asimismo, el PNV mantiene su hegemonía en el País Vasco. Es el favorito para ganar de manera sobrada en Bilbao y San Sebastián, mientras que en Vitoria se lo disputaría con Bildu. Habrá que ver qué pasa en Pamplona, la capital de Navarra, después de que esta semana el PP haya anunciado el fichaje del tránsfuga de UPN Carlos García Adanero para presentarlo de cabeza de lista popular en este municipio.
Finalmente, podrían haber sorpresa en Galicia, ya que el PP apunta maneras y entra en el roce para conseguir la alcaldía de La Coruña, actualmente en manos de la socialista Inés Rey. En la misma situación se encuentra Santiago de Compostela, pero nada similar pasaría en Vigo, donde todo indica que el PSOE arrasaría con una amplia mayoría absoluta. Sería importante para Alberto Núñez Feijóo conseguir la alcaldía de las ciudades más importantes de su tierra natal para dirigirse a las elecciones generales fortalecido.