Un año después, el independentismo no afloja y ha vuelto a salir a la calle, esta vez, para exigir la libertad de los Jordis. En el aniversario del encarcelamiento del presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, y del exlíder de la ANC y actualmente presidente del grupo de JxCat en el Parlament, Jordi Sànchez, miles de personas se han concentrado en la plaza de Catalunya para denunciar la prisión provisional que sufren y exigir que sean liberados.
El acto, organizado por la ANC y Òmnium, ha querido ser reivindicativo pero también emotivo. Así, ha contado con una recopilación de frases de los Jordis, con la interpretación del tema No ens fareu callar de Marcel Pic y con conexiones con las tres prisiones catalanas donde hay líderes soberanistas encarcelados y donde también había concentraciones. El momento en que se ha conectado con el centro penitenciario de Lledoners ha sido uno de los más emotivos, con el despliegue de 365 farolillos en representación de los días que hace que los Jordis están encarcelados.
También se han celebrado concentraciones en las plazas de pueblos y ciudades de toda Catalunya.
Llamamientos de libertad y de unidad
Los manifestantes, muchos de ellos con esteladas y carteles para los presos, han clamado lemas como "fuera, fuera la justicia española", "no estamos todos, faltan los presos, libertad presos políticos", pero también han pedido "unidad", "Puigdemont nuestro president", "queremos República" o "fuera los Borbones".
En el turno de los parlamentos, el vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, también ha exigido unidad a los partidos independentistas. "Es una irresponsabilidad muy grave", ha defendido, pidiendo que "dejemos las diferencias y trabajamos por la unidad". Mauri también ha elevado el tono contra el gobierno de Pedro Sánchez y ha avisado a la justicia española de que sólo aceptarán la "absolución" de los presos. "Lo que hacen ustedes no es diálogo, es imposición y venganza", ha denunciado.
Por su parte, la presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha defendido que la justicia española ha dejado en "evidencia" la española y que el proceso contra los presos es "una farsa y una vergüenza". "España comete crímenes y vulnera derechos", ha denunciado, recordando que "hacer un referéndum no es un delito, es un derecho universal". "No nos detendremos hasta que seamos libres y hasta que lo sea nuestro pueblo", recordando que la lucha del independentismo no sólo para sacar a los presos de la prisión sino también por la independencia.
Paluzie también ha criticado que las decisiones de la fiscalía se sepan antes por la prensa y ha criticado que algunos medios tildaran de "prisión mínima" la posible petición de la fiscalía de 15 años de prisión por el delito de rebelión.
Jordi Sànchez también ha enviado una carta desde Lledoners, donde asegura que "estamos bien y estamos fuertes" porque "sabemos que estáis apoyándonos". Además, el presidente de JxCat ha pedido a los independentistas que se mantengan "vivos, unidos y movilizados" y que "no tengáis miedo de pedir unidad, sólo cuando hemos ido juntos hemos sido más fuertes". "Si vosotros seguís, yo también seguiré. Juntos y dignos hasta la libertad", concluía la carta leída por Paluzie.
"El delito es que te peguen por votar"
En la concentración, que llevaba por lema Un año de vergüenza, un año de dignidad, ha participado el president de la Generalitat, Quim Torra, acompañado del vicepresident, Pere Aragonès, así como de algunos de los consellers de la Generalitat como Elsa Artadi, Ester Capella o Ernest Maragall. También ha asistido el presidente del Parlament, Roger Torrent, así como representantes del partidos independentistas -JxCat, ERC y la CUP- y también de los Comuns. Además, han estado presentes las mujeres de los Jordis, Susanna Barreda y Txell Bonet, así como la de Jordi Turull, Blanca Bragulat, y la hermana de Toni Comín, Betona Comín.
Al inicio de la manifestación, el president Torra ha denunciado la "infamia" que supone que los Jordis lleven un año en prisión preventiva y ha asegurado que es un año "robado" para sus familias. "No hay delito. Votar no es un delito, el delito es que te peguen por votar", ha denunciado el president, que esta tarde ha ido a visitar a los Jordis y el resto de presos políticos a la prisión de Lledoners. Por todo eso, ha pedido una sentencia absolutoria para los presos y ha asegurado que si la sentencia no va en este sentido, "responderemos con radicalidad democrática, como el 1-O y el 3-O".