Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero hay casos los que una cifra acaba siendo mucho más elocuente. Siguiendo este patrón, Òmnium Cultural ha denunciado este martes que en los últimos dos años y dos meses, desde el histórico 20-S de 2017, ha habido 1.396 personas heridas y 292 de detenidas por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, en el marco del procés independentista catalán. La cifra total, incluyendo condenados, encarcelados, o investigados es de "más de 2.500 represaliados", según ha anunciado Marcel Mauri, que se ha exclamado por el hecho de que se trata de un dato "de represión de la disidencia" sólo comparable con el franquismo.
���� Si nos remontamos en otoño del 2017 y miramos todo lo que ha pasado hasta ahora, podemos constatar con datos y hechos las actuaciones del Estado español en contra de derechos fundamentales.
— Òmnium Cultural (@omnium) December 17, 2019
Este es el mapa de la represión: pic.twitter.com/XVYcegIFVi
"Es muy difícil hablar de diálogo y negociación sin tener en cuenta esta cifra de represión, hay que reparar todo este daño que se ha hecho", ha señalado el vicepresidente de Òmnium, encargado de presentar el informe de la mano de representantes de Alerta Solidaria y de Irídia, organización especializada en la denuncia de la represión contra la ciudadanía, y del activista David Fernàndez. Este último ha puesto de manifiesto que "el objetivo de la represión es la renuncia a los objetivos políticos" y ha constatado que en esto el Estado no se ha salido con la suya, porque el independentismo ha ido creciendo en las urnas.
¿De dónde sale la cifra?
La entidad ha desglosado los datos. Así, por ejemplo, en relación a los heridos, la inmensa mayoría, 1.083, se produjeron entre el referéndum del 1-O y los tres días posteriores. El resto de víctimas, 313, consecuencia de las actuaciones policiales han sido durante las protestas del pasado mes de octubre, concretamente entre el día de la publicación de la sentencia del Tribunal Supremo contra los líderes independentistas y el día de la batalla campal en Urquinaona.
En el balance de daños se incorporan los 712 alcaldes y alcaldesas y la cuarentena de personas más investigadas por haber colaborado con el 1-O, doce CDR todavía en prisión preventiva, dieciocho perseguidos judicialmente por clonar webs cerrados, casi una veintena de profesores imputados a raíz del referéndum y, evidentemente, los 10 miembros del gobierno Puigdemont condenados por el Supremo, los dos Jordis y los 9 exiliados.
Para elaborar esta radiografía se han compilado datos públicos, tanto del Govern como del Síndic de Greuges, la Oficina de Derechos Civiles y Políticos y otros colectivos, que han analizado y elaborado informes sobre el alcance de las actuaciones policiales y judiciales de los últimos dos años.
Consejos preventivos para protestar
A las puertas de una nueva gran movilización, la del Tsunami previsto para el Barça-Madrid de este miércoles, Alerta Solidaria, uno de los colectivos que ha protagonizado la presentación de este mapa de la represión ha expresado toda una serie de recomendaciones para quienes salgan a la calle a protestar.
Entre los consejos básicos, ir en grupo y conocer previamente el espacio donde se irá a manifestarse, para identificar posibles vías de salida. Asimismo, defienden que los manifestantes opten por taparse la cara, teniendo en cuenta que "han ido a buscar en casa a personas que no han tomado esta precaución". Al mismo tiempo hacen un llamamiento a la ciudadanía para que tenga "una posición proactiva y grabe a los agentes de policía" cuando "presencian vulneraciones de derechos".
Preocupados por el Tsunami del Camp Nou
Marcel Mauri ha reconocido que "los precedentes no hacen ser optimistas" para pensar que durante la protesta organizada por el clásico no haya una nueva oleada represiva. En cualquier caso, ha hecho un "llamamiento para que la gente salga a la calle" y que pueda haber "una nueva movilización masiva".
El propio David Fernàndez ha confirmado que él estará y ha pedido a los "poderes que corresponden que respeten los derechos de información, de expresión y de manifestación, y que no traten a la ciudadanía como un enemigo interior". El exdiputado de la CUP ha ironizado que "igual le tenemos que llamar nazi a algún nazi y así suspenden el partido".