Después de un largo proceso, la nueva ley de memoria democrática ya es una realidad y después de que se publicara el jueves en el BOE, este viernes ya se empiezan a ver sus efectos. En el día a día de la mayoría de la población los cambios introducidos por esta normativa no tiene un gran efecto, pero quién tenía un título nobiliario que le permitía vivir como un auténtico aristócrata después de que les fuera concedido por la dictadura de Franco, hoy se ha levantado como cualquier ciudadano más: ya no son ni señores, ni duques, ni marqueses ni cuentas. Como Cenicienta, a las 12 de la noche han pasado de formar parte de la aristocracia a perder todos los títulos, con la entrada en vigor de la ley de memoria democrática, que comporta la extinción automática de cualquier título concedido entre 1948 y 1978 y que representen un "enaltecimiento de la Guerra y la Dictadura". En total, 29 personas se han dejado sus títulos por el camino y estas son las más destacadas.
- Carmen Martínez-Bordiú: La nieta, nietísima, más famosa de Franco. Una habitual de la prensa rosa, especialmente por su vida sentimental, que hasta hoy era Duquesa de Franco, título que recibió de su madre Carmen Franco Polo, hija única de Franco y Carmen Polo, y de quien era la primogénita. Carmen Franco fue Duquesa hasta que murió en el 2018 y desde que el rey Juan Carlos I le concedió este título, pocos días después de la muerte del dictador, en noviembre de 1975. Martínez Bordiu también había sido duquesa de Cádiz, para|por su matrimonio con Alfonso de Borbón, entre 1972 y 1982 y su hijo Luis Alfonso de Borbón asegura ser el heredero del trono de Francia, bajo el nombre de Luis XX.
- Francisco Martínez-Bordiú Franco. Más conocido como Francis, hermano de Carmen y también nieto de Franco. Noble desde 1988, como segundo señor de Meirás, otro título que Juan Carlos I le dio a la viuda de Franco, para destacar su papel en "una gloriosa etapa histórica de nuestra patria". Cuando murió su padre, el año 1998, también se convirtió en el marqués de Villaverde. Martínez-Bordiú ha tildado de "tontería" la nueva ley de memoria democrática y ya ha adelantado que él seguirá siendo "señor", aunque Pedro Sánchez no lo quiera.
- Juan Yagüe Martínez del Campo. Militar y duque desde 1959 después de la muerte de su padre, el general Juan Yagüe Blanco. Creado por Franco el 1952, este ducado fue diseñado por Franco para agradecerle a uno de sus colaboradores más estrechos durante el golpe de estado de 1936 su papel, a quien le agradeció su "lealtad y amor en España". Yagüe padre fue falangista y también formaba parte de los conocidos como africanistas y fue a la guerra del Marruecos donde conoció al dictador. Fue el comandante del cuerpo del Ejército Marroquí a la batalla del Ebro y ha pasado a la historia como responsable de la masacre de Badajoz.
- Gonzalo Queipo de Llano y Mencos. En 1950, Franco creó el marquesado de Queipo de Llano en honor a su amigo y general Gonzalo Queipo de Llano y Sierra, recordado especialmente en el sur de España por la represión que llevó a cabo en ciudades de Andalucía, sobre todo Sevilla, sigue enterrado en la Basílica de la Macarena en Sevilla con todos los honores, y a diferencia de los Primo de Rivera, su familia no ha hecho nada para evitar que sea el Gobierno quien lo exhume con la entrada en vigor de la nueva ley de memoria democrática. El último marqués ha sido el nieto de este franquista que antes había sido inspector general del Ejército durante la II República, contra la cual se acabó sublevando. Además, Gonzalo Quipo de Llano siempre ha sido señalado como el responsable del fusilamiento de Federico García Lorca.
- Emilio Mola Pérez de Labora. El nieto del general Emilio Mola Vidal, uno de los protagonistas de la guerra civil, ha perdido el ducado que Franco creó en honor de su abuelo en 1948. Mole estuvo detrás de la sublevación militar en Navarra después de un papel mucho relevando durante la dictadura de Primo de Rivera y murió durante el conflicto cuando se estrelló el bimotor en que viajaba. Fue uno de los planificadores del golpe de estado del 36 y también de la represión para los republicanos, aplicadas durante el franquismo. A pesar de la creación del ducado, la mala relación entre Mole y Franco era de sobra conocidas e incluso se ha planeado que el dictador estuviera detrás del accidente aéreo, pero nunca se ha llegado a comprobar.
- José Calvo-Sotelo y Olry de Labry. Doce años después del golpe de estado, el 18 de julio del 48, Franco creó el ducado de Calvo Sotelo, que concedió a una de las piezas clave durante la dictadura de Primo de Rivera y asesinado por un escolta del socialista Indalecio Prieto. En su momento se definió como un "estadista leal" y su muerte como "desleal, cometido por los esbirros del poder". Su nieto, José Calvo-Sotelo y Olry de Labry, era el titular del ducado, ahora desaparecido.
- Fernando Primo de Rivera y Oriol. Su tío segundo fue el fundador de la Falange y solo ha sido marqués durante dos años, ya que antes tenía este papel su padre, Miguel Primo de Rivera y Urquijo, que también fue alcalde franquista de Jerez. Su hermano, Pelayo, también ha perdido su título.