El 21 de marzo de 2018 saltó el escándalo. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, había obtenido el Máster de Derecho Público del Estado Autonómico sin cursar casi la mitad de los créditos en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC). Cifuentes no presentó su Trabajo de fin de Máster, que supone el 24 de los 60 créditos del postgrado, ni tampoco una asignatura de 3 créditos “La Financiación de las comunidades autonómicas”.

La polémica estuvo en el cambio de notas. Cifuentes había dejado de cursar las dos asignaturas en 2012, por lo que en el expediente académico aparecía un NP (NO presentado). En 2014, esas dos notas cambiaron repentinamente a NOT (Notable). Días más tarde, la Presidenta de Madrid recogió su título en la Universidad Rey Juan Carlos y aprovechó para fotografiarse con diversos responsables de la universidad.

La universidad defendió a Cifuentes

El mismo día que saltó la trampa de Cristina Cifuentes, la Universidad Rey Juan Carlos salió a dar explicaciones. El rector de la universidad, Javier Ramos, junto a Pablo Chico de la Cámara, professor de la asignatura y Enrique Álvarez Conde, profesor que “dirigía” el Máster de Cifuentes achacó la polémica a un “error administrativo”.

Javier Ramos explicó que la presidenta había cursado ambas asignaturas y que los NP (no presentado) que aparecen en el documento presentado por El Diario.es fueron posteriormente rectificados a NOT (Notable) cuando en 2014 Cifuentes pretendía recoger el título. La universidad explicó que se comprobó la nota de las asignaturas y se expedió Máster.

 

Cifuentes se defendió en un vídeo

Cristina Cifuentes se defendió ese mismo día desde su despacho en La Puerta del Sol. La Presidenta se grabó en directo vía Twitter para dar explicaciones. “En La Puerta del Sol, sigo trabajando después de una día de ataques falsos que no van a conseguir desanimarme” aseguraba Cifuentes en el titular del vídeo.

La Presidenta mostró las notas del máster donde aparecían las dos asignaturas aprobadas con un notable tal y como había defendido la URJC. Las dudas no dejaron de rodearla ya que el documento no demostraba su inocencia.

 

 

Dos de los tres actas del máster fueron falsificadas

Mientras Cifuentes y la universidad intentaban convencer de la inocencia de la Presidenta, volvió a salir a la luz otro escándalo que se sumaba a la trama. Dos de los tres actas que aparecían en el documento del tribunal que “calificó” el Trabajo de Final de Máster (TFM) eran falsas. Alicia López de los Mozos y Clara Souto no firmaron ningún documento relacionado con el supuesto TFM presentado por Cifuentes en Julio de 2012. La fecha de la defensa del trabajo, además, coincide con el día en que Cristina Cifuentes celebraba junto a la Selección Española de Fútbol la Eurocopa conseguida el día anterior.

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Cifuentes compareció en la Asamblea de Madrid en un pleno extraordinario

14 días después de que estallara la polémica, Cristina Cifuentes se defendió en la Assemblea de Madrid en un pleno convocado expresamente para aclarar el caso.

La Presidenta advirtió que no iba a dimitir ya que su posgrado era "real y legal", y aseguró que "no hay falsedad o falsificación ni en mis calificaciones ni en mi currículum".

Las pruebas que aportó Cifuentes fueron el pago de la matrícula, un documento con las asignaturas cursadas y la expedición del título. También aportó un correo en el que un profesor pedía el cambio de calificación de sus asignaturas, y para argumentar que era un error común de la universidad, leyó correos actuales de alumnos que solicitaban tramites parecidos.

Lo que no aportó Cifuentes fue su Trabajo de Fin de Máster, ya que según dijo "lo estaba buscando".

Su defensa no convenció a la oposición, que pidió su dimisión

Su comparecencia en la Asamblea frente a la oposición no le sirvió de mucho a Cifuentes. Las contradicciones de la presidenta iniciaron el debate sobre una moción de censura impulsada por Podemos. El partido de Iglesias fue el más crítico con el caso. Lorena Ruíz-Huertas, diputada de Podemos en la Comunidad de Madrid, recordó a Cifuentes que sus supuestos compañeros no la recordaban en el aula. "Nadie la cree; su carrera política ha terminado" le dijo de forma contundente la podemita.

El PSOE se mostró también a favor de la moción. Su líder en Madrid, Ángel Gabilondo, acusó a Cifuentes de "cambiar su discurso según iban saliendo las informaciones". El socialista calificó de "inverosímil" que la polémica sobre el máster solo fueran errores de transcripción administrativos y no una trama que tuviera una presunta implicación del personal administrativo y docente.

La moción no llegó a buen puerto porque Ciudadanos no la contempló. Su portavoz, Ignacio Aguado, apostó por una investigación de la cámara legislativa a pesar de reconocer "la contradicción que supone que Cifuentes cursara un posgrado que supone tal tiempo de estudio, al mismo tiempo que la presidenta era Delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid."

El director del máster reconoció que se había falsificado el acta

El director del màster, Enrique  Álvarez Conde, reconoció el 6 de abril que, efectivamente, se había falsificado el acta que aprobaba el TFM de la líder del PP de Madrid.

Según publicó El Confidencial, el rector de la Universidad, Javier Ramos, presionó a Conde para redactar un acta que avalara a la Presidenta de Madrid. El director del máster tardó solamente tres horas en redactarlo. El resultado fue la falsificación de las firmas de, al menos, dos de las tres que presenta el acta. En el caso de Clara Souto y Cecilia Rosado ni siquiera tienen plaza en la propiedad en la Universidad pública madrileña. Este documento fue el que Cifuentes presentó en su defensa.

Ciudadanos hacía presión y el PP aceptó la investigación

El Partido Popular aceptó la creación de una comisión de investigación que Ciudadanos había propuesto. El apoyo del gobierno de los populares en Madrid, Ciudadanos, había dado un ultimatum de 48 horas al PP para que aceptara la comisión si no querían que, como Podemos y PSOE, pidieran también la dimisión de Cristina Cifuentes.

"Una vez presentada la iniciativa de una creación de Comisión de investigación frente a la Mesa de la Asamblea de Madrid, y si es conforme al reglamento a su objetivo y sus normas, apoyaremos su creación, como siempre" anunció el Partido Popular en su cuenta oficial de twitter de la Comunidad de Madrid.

 

 

Las pruebas acorralaban a Cifuentes

En medio de la investigación, el 10 de abril una de las profesoras que "firmaron" el acta del Trabajo de Final de Máster, aseguró a la policía tener grabadas amenazas del director del Instituto de Derecho Público (IDP), Enrique Álvarez Conde, para que participara en la falsificación del acta.

El mismo día dimitió la subdirectora del IDP, Laura Nuño, por toda la polémica generada al rededor de la Universidad Rey Juan Carlos. Nuño, además, aseguró que su firma, también estampada en un documento donde se convalidaban asignaturas a la Presidenta de la Comunidad de Madrid, no se parecía "en nada" a la suya.

Cristina Cifuentes renuncia al máster

Cifuentes ha renunciado hoy mismo, 27 días después de que estallara la polémica, al Máster en Derecho Autonómico de la Universidad Rey Juan Carlos. Envuelta en una polémica que empezaba a sobrepasarle por todos lados, la Presidenta de Madrid ha decidido, lejos de dimitir y dejar su cargo, renunciar a un título que según las pruebas jamás ha obtenido. 

A pesar de renunciar al máster, Cristina Cifuentes ha asegurado que "no ha cometido ninguna ilegalidad". La líder popular ha culpado de la situación a la Universidad Rey Juan Carlos ya que, según ha dicho en una carta al rector de la universidad, "he cumplido los requisitos que la Universidad me puso para conseguir dicho título".

Ha considerado que, si ha habido irregularidades, han sido de tipo administrativo "absolutamente ajenas" a ella.

Cifuentes también ha pedido disculpas en su carta. "Si me equivoqué, y en aquel momento debí rechazar las facilidades que me ofrecía la universidad, pido disculpas a cualquiera que haya podido sentirse agraviado. Como ya he dicho, solo me movió a participar en este máster mi interés por ampliar conocimientos pese a las dificultades personales que me impedían cursarlo en un régimen ordinario. En ningún momento pretendí sacar ventaja entonces de este máster, ni pretendo sacarlo en el presente o en el futuro".