“Muchos valencianos piensan, yo el primero, que fallaron demasiadas cosas, incluso que falló el sistema entero”. Es una buena forma de sintetizar la comparecencia de Carlos Mazón en las Corts Valencianes en un pleno que tenía que servir para dar explicaciones por la gestión de la DANA que ha causado 217 muertos en el País Valencià y que se ha convertido en un mecanismo de autoexculpación por la negligente respuesta al temporal. En total, el president valenciano ha estado hablando tres horas y media que dejan muchas preguntas sin respuesta, muchas excusas, muchas repeticiones de la palabra «autocrítica» y muy poca asunción de responsabilidades. Las dos flagrantes ausencias de explicaciones son la desconexión de Carlos Mazón el día del temporal y la tardanza en enviar la alerta a los móviles de la ciudadanía, que llegó pasadas las ocho de la noche, cuando las calles estaban inundadas. El presidente valenciano ha asegurado que era “plenamente consciente de cómo estaba la situación” y se ha escudado en el hecho de que la información que recibió la Generalitat era “fragmentada e inexacta” y que los “sistemas de medición de caudales o pluviométricas se vieron sobrepasados”. Centrifugación de responsabilidades.
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“No negaré errores” y “no eludiré ninguna responsabilidad” ha afirmado al inicio de su discurso. Pero ha sido una declaración de intenciones que se ha quedado en el terreno dialéctico. A partir de aquí, se ha dedicado a justificar la tardía reacción de la Generalitat Valenciana disparando contra organismos que dependen del Gobierno, como la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y la Conferencia Hidrográfica del Júcar (CHJ). “Es legítimo preguntarse si en general el sistema respondió cómo creemos que tendría que responder, no lo hizo”, ha esgrimido. Mazón, con una expresión fría, lejos de expresiones de humildad y refugiándose detrás de grandes dosis de información técnica y listas de datos inacabables, se escudaba en los errores y las deficiencias del sistema en su conjunto para evitar hacer balance en primera persona de la gestión, las decisiones y la capacidad de reacción de la Generalitat Valenciana. Otro ejemplo: “La catástrofe era tan colosal que no solo venció nuestras defensas hidrológicas, sino que superó nuestros protocolos porque demostró que nuestro sistema de detección y alerta tiene grietas”. El único compromiso que ha asumido es no presentarse a la reelección en 2027 si no es “capaz” de reconstruir el País Valencià. Una “responsabilidad política” en diferido y a largo plazo.
El tuétano de los interrogantes que todavía ciernen sobre su gestión se ciñen a su ausencia el martes de la tragedia. Desapareció un buen puñado de horas porque estaba comiendo con la periodista Maribel Vilapana para ofrecerle la dirección de À Punt. Estuvo con ella hasta las seis de la tarde y se incorporó a la reunión del CECOPI a las siete y media de la tarde. Ahora bien, en su exhaustivo repaso de la cronología de ese día, no ha hecho ninguna alusión al encuentro con Vilaplana. Mazón ha defendido que mantuvo su agenda “plenamente consciente de cómo estaba la situación” y sabiendo que “se estaba en contacto con delegación del Gobierno” y ha relatado fue cuando lo advirtieron que la situación en la Presa de Forata empeoraba que se desplazó a la reunión. De camino, había una “gran densidad de tráfico” que “alargó el trayecto”. A partir de aquí, se ha limitado a decir que su ausencia no pospuso el envío de la alerta, aunque el aviso masivo en la población estuvo sobre la mesa a las seis de la tarde y no se envió hasta que él llegó.
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Más excusas. El president valenciano ha aludido a un supuesto “apagón informativo” de la Conferencia Hidrográfica del Júcar y ha criticado que enviara un “simple correo electrónico” para informar de una crecida “brutal” del barranc de Xiva (o rambla de Poio). “Es llamativo que piensen que con un correo electrónico será suficiente, y no piensen en llamar, ya que la situación ya estaba desbordada”, ha lamentado. Sin embargo, la realidad es otra. La CHJ envió 198 avisos a la Generalitat Valenciana a lo largo de todo el día de la DANA alertando, por ejemplo, de las precipitaciones y de los aumentos de los caudales que se acabarían desbordando. Además, poco antes de las cinco de la tarde, envió dos correos clave advirtiendo del aumento de las lluvias en Xiva y durante el rato que Mazón estuvo desconectado envió 62 avisos procedentes del Sistema Automático de Información Hidrológica. Eran avisos que apuntaban a la superación de umbrales en caudales y en pluviómetros. Por lo tanto, había información. Carlos Mazón también ha intentado justificarse por eliminar el vídeo de su Twitter en el que pronosticaba que el temporal disminuiría a partir de las seis de la tarde: ha aducido que pretendía “eliminar una información que, tal como había evolucionado la situación, podía resultar confusa al haber quedado obsoleta”.
76 segundos en valenciano
A lo largo del discurso, Carlos Mazón solo ha tenido poco más de un minuto para dirigirse al pleno y a la ciudadanía en valenciano, reconocido por el Estatuto de Autonomía como la “lengua propia” del País Valencià. El testimonial cambio de idioma ha sido al final de su primera intervención, cuando ha instado a los diputados de la oposición a no atacar “desde el dolor” y ha mencionado todas las poblaciones afectadas por la DANA que forman el “mapa de las lágrimas de toda la Comunitat”.
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Feijóo anticipó que “mucha gente” se sentiría “parcialmente reconfortada” con la comparecencia
De momento, el PP guarda silencio después de la comparecencia de Mazón. “No haremos valoraciones”, se limitan a contestar fuentes de los populares consultadas por ElNacional.cat. “Le aseguro que después de esta comparecencia habrá mucha gente que se sienta al menos parcialmente reconfortada con la clase política”, afirmó al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, el miércoles en una rueda de prensa en el Congreso, donde también pidió estar “atentos” a los “compromisos y decisiones” de Mazón. Unas decisiones que todo hacía pensar que se traducirían en los ceses de las dos conselleres más polémicas de la DANA, pero que se han limitado a una leve reconfiguración de la estructura del Consell de la Generalitat Valenciana: una vicepresidencia que se encargará de la recuperación económica y social y una nueva conselleria de Emergencias e Interior. Esta mañana, en un acto con empresarios en Galicia, Feijóo se ha mostrado convencido del “compromiso” de Mazón para hacer frente al trabajo “largo, durísimo e ingente” de la reconstrucción. “Ya no caben las equivocaciones que hemos tenido en la gestión. La gente no las aceptará y no las merece”, ha admitido.
“El president a Picassent”
Antes de que empezara la comparecencia de Carlos Mazón, más de un centenar de personas se han concentrado delante de la puerta del Palau de Benicarló, sede de las Corts Valencianas, para protestar contra el president valenciano, que ha llegado a las nueve de la mañana para esquivar la regañada directa de los concentrados. «El president a Picassent», llamaba a la multitud de gente, en referencia a la prisión de Picassent. Entre los gritos, también se ha podido escuchar «Mazón criminal», «Mazón dimisión y nuevas elecciones», «Mientras comía, el pueblo se ahogaba» y «No son muertos, son asesinados».
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“Un president que abandona a su pueblo no merece ser presidente”
Como era de prever, la oposición ha reprobado la gestión de la Generalitat Valenciana. Pero lo ha hecho con diferentes tonos. El único partido que ha pedido explícita y directamente la dimisión de Mazón ha sido Compromís. “Un president que abandona a su pueblo no merece ser president de la Generalitat. Dimitió de la responsabilidad de proteger a la gente, solo falta que dimita de su cargo”, le ha lanzado Joan Baldoví. El líder de Compromís en las Corts sostiene que Mazón “se aferra al cargo” con el objetivo de “limpiar pruebas y manipular relatos” y, convencido de que Mazón acabará ante un juez por su gestión, considera que su discurso “lo han escrito sus abogados” como “escrito de defensa”. Por su parte, los socialistas valencianos se saltan una pantalla y apelan directamente al Partido Popular: “Exigimos que destituya el señor a Mazón y que nombre a un presidente técnico y de transición”, ha proclamado el síndico del PSPV-PSOE, José Muñoz, que ha puesto los votos de los socialistas a disposición del PP. Su apuesta es que se convoquen elecciones anticipadas en 2025 una vez se haya culminado el proceso de reconstrucción.
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Finalmente, Vox (que gobernó en coalición con el PP durante un año y ostentaba la responsabilidad en emergencias antes de la ruptura) ha criticado la gestión de Carlos Mazón, pero no le ha pedido la dimisión ni le ha retirado su apoyo. “Sabemos muy bien distinguir entre la incompetencia de los unos y la negligencia criminal de los otros”, ha afirmado el síndico del partido de extrema, José María Llanos. El parlamentario ha pedido a Mazón “no ceder al chantaje de los que manejan las tragedias para sus cálculos políticos” y ha dejado claro que exigirán “explicaciones hasta llegar al fondo de la verdad y depurar responsabilidades”. De momento, la batería de querellas que ha impulsado la formación de Santiago Abascal deja el gobierno valenciano al margen. “Eso de Sánchez no tiene solución, ni siquiera la prisión mitigaría el mal. Usted y el PP tienen que mejorar mucho. Llega tarde, pero llegue”, ha añadido José María Llanos.