La decisión de Junts per Catalunya de votar en contra de los objetivos de estabilidad presupuestaria ha sido un golpe duro para el Ejecutivo de Pedro Sánchez. El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, lo confirmaba en una conversación con el diputado republicano, Francesc Marc Álvaro, que ha sido captada por los micrófonos del Congreso. Urtasun reconoce que el voto en contra de Junts es una jugarreta por la Moncloa, que se muestra débil justamente en el aniversario de las elecciones del 23-J. "Es una hostia para el Gobierno", afirma el ministro.
En el exterior de la Cámara, donde a menudo comparecen los políticos ante la prensa, Urtasun habla cerca del atril con Álvaro sobre la decisión de los juntaires. "No lo entiendo. María jesús (Montero) me había dicho que lo tenía todo ligado", explica Urtasun quién es ajeno en qué era grabado, incluso llega a decir: "Eso entre nosotros". Lo que el ministro de Cultura quería dejar solo entre él y el diputado republicano era que Félix Bolaños, ministro de Presidencia, se había dado cuenta de la decisión de Junts en la reunión que tuvo con Míriam Nogueras. "Me he quedado de piedra", reconoce el ministro Sumar, que añade: "En el Consejo de Ministros nos han dicho que lo tenían todo ligado y después resulta que no".
Sin mayoría
Al anunciar la decisión de Junts, el diputado Josep Maria Cruset ha afirmado: "Nos encontramos ante un gobierno que no quiere entender que no tiene mayoría absoluta en el hemiciclo y que necesita otros grupos, en este caso, de los siete votos de Junts para sacar adelante sus iniciativas. Mientras no cambie el déficit de ejecución de los presupuestos que tanto perjudica Catalunya el gobierno no puede contar con los votos de Junts para la tramitación de los presupuestos generales de 2025".
Según argumentan desde Junts, han avisado en varias ocasiones al PSOE de que ellos no forman parte "de ningún bloque" dentro del Congreso, de manera que nunca se pueden dar por conseguidos sus votos. Sin embargo, han resaltado que el bajo porcentaje de ejecución presupuestaria en Catalunya es uno de los principales impedimentos para facilitar la tramitación de las cuentas del próximo año. Cruset ha subrayado la falta de cumplimiento presupuestaria que sufre Catalunya. Concretamente, ha apuntado que los datos de 2023 muestran que se ha ejecutado "solo" un 45% de lo que se presupuesta. Según su opinión, esta cifra contrasta con los porcentajes de comunidades como Madrid (212%), Murcia (218%) o Castilla-La Mancha (115%). "Si miramos la totalidad, Catalunya queda al porcentaje más bajo de todo el Estado", ha lamentado Cruset antes de recordar que los catalanes son los que más aportan al presupuesto español.