“Hoy es el principio del fin de la dictadura que nos gobierna”. Nueva protesta en la calle contra Pedro Sánchez. Una concentración convocada en la Plaza Castilla de Madrid, a la cual han asistido Santiago Abascal y dirigentes del PP y promovida por decenas de entidades de la sociedad civil, encabezadas por la Plataforma por la España Constitucional, con un doble objetivo: “Defender la unidad, la dignidad, la ley y la libertad” y exigir la convocatoria inmediata de elecciones generales. Y con un mensaje claro dirigido al españolismo radical: “Delante de los Juzgados de Plaza Castilla, pedimos que los fiscales honrados que aún quedan y los abogados del Estado honestos nos ayuden en nombre de la libertad, la justicia y la igualdad a actuar con contundencia para defender la democracia y la constitución”. Los convocantes, en palabras de Albert Castillón (periodista) y Marcos de Quinto (exdiputado de Ciudadanos), catalogan al presidente del Gobierno de “pequeño dictador”, “sátrapa que usa la Constitución para su beneficio”, “enemigo común” y “aprendiz de tirano”, y auguran que “no se marchará por la vía ordinaria ni por las urnas”, sino que “tendrá que echarlo la justicia”. Ante este discurso, una respuesta al unísono de la gente concentrada: “Pedro Sánchez, a prisión”. La delegación del Gobierno cifra a los asistentes en 25.000, mientras que la organización lo eleva a 400.000 personas.
Más tarde, Marcos de Quinto ha puesto en relieve que la concentración tiene lugar cerca de los juzgados donde “pronto desfilaran muchos miembros de la banda de Sánchez que no están aforados” y ha pedido poner fin al “golpe de Estado que está perpetrando” un “gobierno de golfos” que “tumba la Constitución por la puerta de atrás” y que “ha rescatado a ETA”. “Pedro, te desprecian tus socios, que se han aprovechado de tu debilidad. Pedro, sois chusma, vete ya con tu banda y deja España en paz”, ha concluido de Quinto. Entre la gente, gritos de “Esta traición la vais a pagar” y de “Nuestro presidente es un delincuente”.
El acto ha arrancado después de media hora de espera, justo enfrente de las famosas torres KIO de Madrid. Antes de ello, se han dado instrucciones desde la megafonía para que la gente congregada en los laterales se desplazara en la parte central del Paseo de la Castellana, justo en la entrada del túnel. En este rato, se ha emitido una versión del NO-DO franquista para denunciar la ley de amnistía y han sonado canciones como el Que Viva España de Manolo Escobar. La respuesta del público: gritar que “No es una fiesta, es una protesta” y exclamar que “Con musiquita, Pedro no se va”. Previamente, pocos minutos después de las doce, ha habido una pancarta gigante que ha recorrido la manifestación: en inglés, proclama que «España está dejando de ser una democracia para convertirse en una dictadura» al lado de una cara de Adolf Hitler. Las otras pancartas que se pueden ver exhibidas por manifestantes van en la misma línea: «Sánchez dictador», «Sánchez traidor», «Sánchez destructor de España» y «No al golpe de Estado». También catalogan el Gobierno de «mafia», tildan al PSOE de «vendepatrias» y piden «más muros y menos moros» y «billete de vuelta para delincuentes extranjeros».
Desde los comicios del 23-J de 2023, se han sucedido las protestas contra el PSOE y contra sus acuerdos con los independentistas. A diferencia de la gran mayoría de ellas, que han estado impulsadas por el Partido Popular, la de este domingo recuerda la que tuvo lugar en la Plaza de Cibeles en noviembre, también impulsada por la sociedad civil, la misma semana que Pedro Sánchez fue investido presidente del Gobierno. Ahora, esta concentración culmina la que ha sido una semana horribilis para Pedro Sánchez con reveses en los tres frentes judiciales que tiene encima de la mesa. El principal ha sido la decisión del Tribunal Supremo de abrir una causa penal contra el fiscal general del Estado (por primera vez en la historia) por presunta revelación de secretos en el caso de la pareja de Isabel Díaz Ayuso. La Moncloa ha cerrado filas con él, pero las voces pidiendo su dimisión llegan desde el PP y desde la cúpula de la Fiscalía. En paralelo, la Fiscalía Anticorrupción se ha mostrado partidaria de que el Tribunal Supremo investigue a José Luis Ábalos, el ex número tres del PSOE, en el marco del caso Koldo, porque considera que el exministro de Transportes tuvo un “papel principal en el entramado”. Y, finalmente, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha rechazado por unanimidad la querella que presentó la Abogacía General del Estado contra Juan Carlos Peinado acusándolo de prevaricación.
Santiago Abascal y dos dirigentes del PP participan en la concentración
Uno de los primeros en difundir la convocatoria fue Alejo Vidal-Quadras (expresidente del PP catalán y uno de los fundadores de Vox) y, posteriormente, se han sumado a ella Vox, con Santiago Abascal al frente, y su fundación (la Fundación DENAES) y el PP. Sin embargo, los populares han mantenido un perfil más bajo que la formación de extrema derecha: Génova no ha hecho ningún llamamiento a asistir, mientras que el PP de la Comunidad de Madrid o el grupo parlamentario del Congreso sí que han animado a participar en ella. Del Comité de Dirección del partido, han participado Carmen Fúnez (vicesecretaria de Organización Territorial), Noelia Núñez (vicesecretaria de Movilización y Reto Digital) y Alicia García (portavoz del PP en el Senado).
Antes de comenzar la concentración, Carmen Fúnez ha afirmado que los españoles están “cansados de la mentira, de la falta de limpieza del Gobierno y de la corrupción” en el momento más “delicado” de la democracia española, ha denunciado que el Gobierno no pare de “atacar y perseguir a los jueces” y ha pedido a Pedro Sánchez que “actúe como un demócrata”. Por su lado, Santiago Abascal ha criticado que el PP haya “ofrecido pactos de Estado” al PSOE “entregándole los tribunales” o “repartiendo la inseguridad y la ruina que trae inmigración ilegal”. “¿El PP va a renunciar a los pactos con el PSOE? ¿Va a hacer propósito de enmienda reconociendo que ha hecho mal entregando la Justicia y el Tribunal Constitucional al PSOE?”, se ha preguntado. De fondo, uno de los asistentes comenta: “Es el PSOE azul, no sé cuál es peor”. Además, el líder de Vox se ha vuelto a abrir a apoyar a una moción de censura para convocar elecciones “si no hay cesiones a los separatistas”.
Una protesta para denunciar el “gravísimo deterioro de la democracia” y la “obscena compra de apoyos parlamentarios”
“No es una concentración de izquierdas, derechas o centro, sino de demócratas dispuestos a hacer frente a un proceso que conlleva un carrusel de cesiones ilimitadas y decisiones que trituran el interés común, pervierten la Constitución y la ley y ponen las bases para una irreversible decadencia”, sostiene el manifiesto de la protesta. El documento denuncia el “gravísimo deterioro de la democracia que vive España” y la “obscena compra de apoyos parlamentarios con medidas que socavan la igualdad, la solidaridad interterritorial y el imperio de la Ley”. Concretamente, disparan contra la “concesión a los nacionalistas del cupo catalán”, la “cesión de la gestión de la Seguridad Social al País Vasco”, la “aprobación de una amnistía inmoral e inconstitucional”, la “colonización” de instituciones y la “corrupción que rodea al entorno del presidente”. Las asociaciones convocantes esgrimen que la democracia “no prevalecerá si las sociedades que se benefician de ella no se articulan en su defensa ante las amenazas que la acechan”.