La manifestación de este sábado en València, con motivo de la Diada del País Valencià, ha reunido miles de valencianos y valencianas que han denunciado la impunidad de la violencia fascista en la ciudad. En la concentración, que ha sido la más numerosa de la jornada, se ha demostrado que la mayoría social y política valenciana es partidaria de los valores de progreso y de país, del diálogo, del respeto y de la construcción en positivo.
En la protesta, convocada por la Comisión 9 de Octubre, las entidades han firmado un documento conjunto donde denuncian la recentralización del Gobierno y l'infrafinanciación del País Valencià. Precisamente, el secretario de Acción Cultural del País Valencià, Toni Gisbert, ha asegurado que el País Valencià "todavía está esperando una propuesta de financiación justa". Asimismo, ha indicado que se trata de una "cuestión de supervivencia, que el dinero no se queda en Madrid para quién sabe qué. Pedimos que nuestros impuestos se dirijan a una sanidad, a una educación valenciana adecuada".
Gisbert también se ha dirigido al presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, para que el gobierno no se muestre pasivo ante "la censura del valenciano en los medios y que la reciprocidad con TV3 y IB3 sea una realidad". Además, ha lamentado que el grupo parlamentario de Compromís "no ha podido manifestarse con tranquilidad" esta mañana.
"País Valencià antifascista"
La marcha, bajo el lema "País Valencià antifascista", ha denunciado la agresividad verbal, la intolerancia y los intentos de imponer valores excluyentes, discriminatorios, antivalencianos y violentos que llevan a cabo algunos partidos.
Durante el recorrido, los asistentes han llamado frases como "Guillem Agulló, ni olvido ni perdón", "Independencia" y "Nazis no", y al paso de la manifestación por la plaza del Ayuntamiento se ha oído el himno de Valencia desde un balcón, que ha sido aplaudido por algunos peatones.
La Comisión, integrada por asociaciones como Acción Cultural, varias plataformas, los sindicatos CCOO e Intersindical y los partidos Compromís, Esquerra Republicana, EUPV, Podem y PSPV-PSOE, ha celebrado la manifestación bajo un fuerte despliegue de seguridad.
Los organizadores han llamado a "no abandonar las calles". Asimismo, han criticado el "españolismo rancio" que "ataca por hablar y expresarse en valenciano".
Por otro lado, han reivindicado que las políticas "vayan acompañadas de una acción social" ante "el aumento de los desahucios, la escandalosa subida del precio de la luz y la gasolina, las familias en situación en pobreza y el trabajo más precario".