Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales y secretaría general de Podemos, ya se ha pronunciado a través de las redes sociales sobre el anuncio del espionaje a través de Pegasus a Pedro Sánchez y a la ministra de Defensa, Margarita Robles. Y lo ha hecho clamando por una depuración de responsabilidades por lo que considera que es un "error inasumible" por parte de los sistemas de seguridad. "La información revelada por el ministro de Presidencia muestra una profunda brecha en la seguridad del Estado. Venga de donde venga, el error es inasumible. Es imprescindible depurar responsabilidades. Está en juego nuestra democracia y la confianza de la ciudadanía". Según ha explicado el ministro Bolaños en una rueda de prensa después de denunciar los casos de espionaje (dos ataques a Sánchez y otro a Robles durante los meses de mayo y junio del 2021), ahora mismo se están investigando todos los teléfonos de los miembros del gobierno de coalición, motivo por el cual la misma Belarra habría podido sufrir un ataque a través de Pegasus. "La verificación todavía está en marcha y llegará a todos los miembros del Gobierno. Son unos hechos contrastados que confirman que se ha producido un espionaje fuera de la ley. En una democracia plena, solo están facultados organismos oficiales y con autorización judicial". Según ha afirmado el ministro, la información ya se ha transmitido en los tribunales y se irá complementando con lo que vaya surgiendo a raíz de la investigación en curso.

Tuit de Ione Belarra

Bolaños también ha asegurado que desde la Moncloa están convencidos de que se trata de un ataque ilícito y externas, evitando aclarar si se trata de un estado extranjero, ya que, considera, "no es el momento de hacer especulaciones". Por eso mismo, Belarra ha pedido que "venga de donde venga" el espionaje hacen falta depurar responsabilidades. La secretaría general de Podemos ya subrayó, poco después de que estallara el CatalanGate, que se tenían que asumir las responsabilidades por el espionaje a los líderes independentistas. Ante el silencio o las burlas de los socialistas, desde de Unidas Podemos han ido pidiendo constantemente que se avanzara en la investigación de este escándalo. Belarra ya reclamaba el 29 de abril que no se podía esperar más y que "nadie tiene que poder justificar el espionaje por motivos políticos".

"Cuestión de higiene democrática básica"

En este sentido, la ministra ha lindado con Margarita Robles. Aunque el CatalanGate no es la primera vez que demuestran sus diferencias, Belarra censuró el discurso de Robles delante del Congreso de los Diputados en qué reconoció y justificó el espionaje con Pegasus. En la misma línea, el portavoz del grupo parlamentario, Pablo Echenique, aseguró que las declaraciones de Robles, ahora espiada, lo habían dejado "estupefacto", mientras pedía que rodaran las cabezas de los responsables.

En aquel momento, Belarra justificaba que el Gobierno era precisamente el principal interesado en aclarar cualquier tipo de duda sobre la actuación del estado y que, mientras van pasando los días, ya es una "cuestión de higiene democrática básica que se asuman las responsabilidades políticas necesarias". Estas palabras hoy se han intensificado, a la espera de descubrir si su teléfono también ha sido infectado.