Las fiestas de Navidad y el puente de la Purísima están a la vuelta de la esquina y el conseller de Interior, Miquel Sàmper, ha pedido que las celebraciones se hagan con las personas más próximas con el fin de no mezclar varios grupos de convivencia.
El titular de Interior se ha referido al puente que empieza este fin de semana recordando que si se decide desplazarse a otro municipio hay la obligación de no salir de este: "Si nos marchamos de fin de semana nos tenemos que quedar en el pueblo donde estemos", ha indicado en una entrevista a RAC1.
Del mismo modo, ha asegurado que los Mossos y las policías locales controlaran el cumplimento del confinamiento municipal, que podría ser comarcal a partir del lunes si se pasa de tramo. "El puente lo tenemos que tener muy bien controlado", ha manifestado. Ha añadido que de lo que se haga durante estos días puede depender la Navidad.
Las restricciones de movilidad no se modificarán el próximo fin de semana aunque haya el puente de la Purísima, y por lo tanto las limitaciones de movilidad serán del jueves por la noche al lunes por la mañana.
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Las reuniones de 10 personas
El Govern se plantea permitir que en las comidas de Navidad se puedan reunir hasta diez personas, de un máximo de dos burbujas de conviventes, y está pendiente de decidir si los menores de 14 años contarán igual que los adultos en este cómputo.
Sobre este tema, Sàmper ha subrayado que "todavía no tenemos vacuna" y que, por lo tanto, "no podemos proteger a los más vulnerables, como las personas mayores". Cuando menos, ha explicado que esta y otras cuestiones referentes a la Navidad se tienen que debatir con el Gobierno.
Sin embargo, el conseller ha apuntado que si se quieren permitir las reuniones de diez personas y la movilidad entre comunidades autónomas, "se tendrá que hacer con mucho control".
El cambio de tramo
Estas declaraciones se han hecho al día siguiente de que se empezaran a ver los efectos de la reapertura del primer tramo, por ejemplo de la restauración. Sàmper aseguraba este martes que el cambio de tramo está supeditado a una Rt menor de 0,9 y el último dato es de 0,84.
Después de muchos días de mejora en los datos, ayer los indicadores epidemiológicos no daban buenas noticias, lo que hizo temer que se frenara el avance en la reapertura. Cuando menos, la consellera de Salut, Alba Vergés, hizo un llamamiento a la calma: "El paso a la fase dos este lunes día 7 no está en peligro".