Las presiones y coacciones a Jenni Hermoso y a su entorno para salvar a Luis Rubiales han marcado la tercera sesión del juicio por el beso no consentido que el entonces presidente de la Federación Española de Fútbol dio a la jugadora durante la celebración del Mundial de 2023. Después de que el hermano de la futbolista, Rafa Hermoso, haya testificado que Jorge Vilda le advirtió de las “consecuencias personales y profesionales que todo esto podía tener” para su hermana, Misa Rodríguez se ha expresado en los mismos términos. La portera del Madrid y de la selección española ha relatado que en el avión de vuelta a Madrid vio que Jenni Hermoso estaba afectada: “La vi que iba de un lado a otro, no la vi bien. Cuando subimos al avión, la vi triste. En varias ocasiones, la vi llorando”. Todo ello fue a consecuencia del beso no consentido y de la repercusión que estaba teniendo: “Cuando Luis [Rubiales] habló con ella, nos acercamos Irene Codina y yo. Se sentía presionada porque le estaban diciendo que hiciera un video que ella no quería […] Ella nos comunicó que no quería hacerlo y nosotras la apoyamos en su decisión”, ha señalado.
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Dos respuestas y tres frases más de Misa Rodríguez. “¿Les comentó si quería el beso?”, le ha preguntado la fiscal. “En ningún momento nos dijo que el beso había sido consentido”, ha dejado claro la jugadora. “¿Cómo la vio anímicamente?”, ha planteado. “En el vestuario, la vi bien. Cuando fuimos al bus, vi que la euforia baja y la vi anímicamente mal, dispersa, no estaba en lo que estábamos en ese momento, que era la celebración. […] La noté que estaba pensando en otras cosas, la noté cabizbaja”, ha expuesto. Asimismo, ha reconocido que al principio bromearon sobre el beso, pero acabaron tomando consciencia de su relevancia: “Se bromeó hasta el momento que Irene [Paredes] soltó el comentario de ‘Chicas, esto es muy serio’. Bajamos pulsaciones y sentimos que era una cosa muy grave”.
Ya en el avión, hubo “varias charlas” de personas que se acercaban a hablar con Rubiales sobre el beso: “Había una persona de Vox a mi lado que dijo que el beso no tenía importancia”, ha asegurado. Y una última frase. Ángel Chavarría, abogado de Jenni Hermoso, ha pedido el visionado de un fragmento de un directo de Instagram que hicieron las jugadoras en el vestuario en el que se escucha a Hermoso diciendo “Pues vale”. “¿A qué se refiere?”, le ha preguntado. “En ningún momento al consentimiento del beso, es un ‘Pues vale’ de ‘Tú qué has dicho, qué has hecho’, un ‘Pues vale, qué hago’”, ha subrayado ella. “¿En ningún momento manifestó consentimiento? No”.
“No era ella, no disfrutaba, su cabeza estaba en otro sitio”
Misa Rodríguez también ha señalado el papel de Albert Luque y Rubén Rivera, los dos acusados, durante el viaje de las jugadoras en Ibiza para celebrar el Mundial. “¿Cómo encuentra a Jennifer en Ibiza?”, le ha preguntado la fiscal Marta Durántez. “No era ella, le habíamos dicho que intentara desconectar, pero la vi que no era ella. En ningún momento salió de fiesta, la veía que no estaba en ese momento. No disfrutaba, su cabeza estaba en otro sitio”, ha contestado Misa Rodríguez. “[Jenni Hermoso] nos contó que seguía recibiendo presiones de Albert Luque, que insistía en hablar con ella”, ha relatado la jugadora, que ha reconocido que le sorprendió que él estuviera allí: “Me parece raro que una persona que no tiene nada que ver con nosotras estuviera allí en donde estábamos nosotras”, ha sostenido.
Asimismo, ha apuntado que sabía por “mensajes que había visto del móvil” de Ana Belén Ecube (amiga de Hermoso, que declara el jueves como testigo) que Luque quería hablar con ella sobre el beso. “¿Está segura que era sobre ese tema?”, le ha preguntado Jorge Navarro, abogado de Albert Luque. “Sí, porque yo vi los mensajes de Ecu. Ecu me enseñó los mensajes”, ha señalado. “¿Sabe si el señor Luque quizás iba a Ibiza para ofrecerle algún tipo de apoyo?”, ha insistido el letrado. “No, era más bien para ayudar al señor Rubiales”. “¿Está en la certeza de que era para ayudar a Rubiales? Sí, no era para hablar amistosamente con Jenni. ¿Cómo lo sabe? Porque estaba claro, vi los mensajes. ¿Está absolutamente segura? Sí, del móvil de Ecube, me lo enseñó”.
Rafael del Amo: “Estaban intentando presionar y dije que no me estaba gustando”
Otro de los testigos que ha declarado hoy ha sido Rafael del Amo, que era presidente del Comité Nacional de Fútbol Femenino en el Mundial de 2023 (y dimitió después de los hechos) y actualmente es presidente de la Federación Navarra de Fútbol. Estaba sentado al lado de Luis Rubiales en el avión y, de entrada, ha narrado una conversación que tuvo con él: “Le dije que se arreglaba fácil: era hablar con Jenni y pedir perdón. ‘Rafa, pedir perdón no. Ha sido una cosa que ha sido de mutuo acuerdo y ha sido de esta forma y ha sido así’. ‘Yo así no lo veo, pero lo respeto, tú eres el presidente y tú sabes’”. En toda esa cronología, fue cuando Rubiales y su equipo buscaban la fórmula para exculparlo del beso no consentido y fue cuando el entonces presidente de la RFEF pidió a Jorge Vilda que hablara con el hermano de Jenni Hermoso, que también ha certificado ante el juez las presiones que recibió. “Había cosas que no me estaban gustando”, ha reconocido Rafael del Amo.
“¿Qué cosas no le estaban gustando?”, le ha preguntado la fiscal Marta Durántez. “Estaban intentando llegar a un acuerdo, presionar o hablar con Jenni y con los entornos. Y yo le dije que a mí eso no me estaba gustando, que no estaba de acuerdo y que yo lo hubiera zanjado antes”, ha contestado. “¿Por qué habla de presión? ¿En qué consistía? No me estaba gustando el tener que darle más vueltas a la situación. Si no quiere hablar, lo dejamos y ya está”, ha añadido. “¿En qué consistían las presiones? En insistir a Jenni y al entorno de Jenni”. “Yo estaba delante, no participaba, pero escuchaba y creo que no llegaba a buen puerto”, ha concluido.
Dos momentos más en el avión. “Ivana [Andrés, la capitana de la selección] estaba llorando y me contó que alguien le estaba pidiendo que hiciera un video y que se posicionaría. Y yo le dije que no tenía por qué hacer ningún video en esa situación”, ha relatado. Posteriormente, cuando hicieron escala en Doha, Rubiales grabó el vídeo para excusarse por el beso. Fue cuando dijo que no había habido “mala fe por parte de ninguna de las dos partes”. “El presidente me lo enseñó y no me gustó, le dije que no estaba de acuerdo, esto no se lo cree nadie. A mí no me gustaba, yo era de pedir perdón”, ha verbalizado el testigo. Y un último episodio. Durante la Asamblea Extraordinaria de la RFEF en la que Rubiales se aferró al cargo, Rafael del Amo fue muy crítico con su infame discurso: “Dije que lo que estaba diciendo en su discurso no era verdad. Dije dos o tres veces en voz alta ‘No es cierto’ y me echó el alto el secretario general”.
Luis Rubiales renuncia al testimonio de sus hijas
La tercera jornada del juicio ha empezado con una novedad. Olga Tubau, la abogada de Luis Rubiales, ha pedido la palabra para renunciar al testimonio de sus hijas. El expresidente de la RFEF tiene tres hijas y dos de ellas estaban citadas el lunes para declarar como testigos: Lucía y Ana Rubiales Delicado. Iban a testificar telemáticamente, pero Olga Tubau ha considerado que su declaración ya no era necesaria. El lunes, Jenni Hermoso señaló que el entonces presidente de la RFEF había apelado a sus hijas para intentar convencerla de que grabara un video con él quitando hierro al beso no consentido: “Yo le dije que no, que no iba a hacer nada, que yo no había propiciado nada y no era quién para hacer ningún vídeo. Me pidió por favor que lo hiciera por sus hijas, que estaban detrás llorando y lo estaban pasando muy mal, y yo le dije que lo sentía, pero que no iba a hacerlo”, relató la jugadora.
Este jueves declararán tres jugadoras más, Alexia Putellas, Irene Paredes y Laia Codina, así como Ana Belén Ecube (amiga de Jenni Hermoso) y Javier Puyol (responsable de compliance de la Federación). Los últimos tres testigos serán el lunes, cuando será el turno de Salvador Losa Marí y Alejandra Hernández Guevara (propuestos por Rubén Rivera) y Montserrat Tomé (la segunda entrenadora de la selección femenina durante el Mundial y actual seleccionadora).