No se ha llegado a debatir este martes, como estaba previsto, porque no ha habido tiempo en el pleno del Congreso de los Diputados. No obstante, este no es el único muro con el que chocará la moción de Esquerra Republicana. El texto, que defenderá Gabriel Rufián finalmente este miércoles, reclama al Gobierno la negociación de un referéndum de autodeterminación para Catalunya. Y chocará, en la votación, con el muro del Gobierno. El no del PSOE ya era previsible. No tanto la abstención de Unidas Podemos, que defiende la consulta pero critica el cómo y el cuándo escogido por los republicanos. El cómo no tendría que ser una moción en el Congreso y el cuándo no debería ser 48 horas después de las elecciones catalanas.
Concretamente, el texto registrado por los republicanos después de la interpelación a Iceta insta al Gobierno a "negociar un referéndum de autodeterminación con el Govern de la Generalitat de Catalunya como solución pactada y democrática al conflicto político". Sin embargo, con justificaciones diferentes, los dos socios del Gobierno no han accedido a dar apoyo. Sí que la apoyarán --que hayan anunciado hasta ahora-- la CUP, el PNV, Más País y Compromís.
La portavoz socialista en el Congreso de los Diputados, Adriana Lastra, ha dado por descontado su voto en contra. "A nadie le tiene que sorprender la posición del PSOE en contra de esta moción", ha apuntado en rueda de prensa. Lastra ha asegurado que "somos el partido del diálogo, como ha quedado refrendado por los catalanes". Por lo tanto, ha concluido al respecto, "en este camino transitaremos en la mesa de diálogo cuando se forme el Govern de Catalunya". Una mesa de diálogo donde tampoco contemplan aceptar el referéndum de autodeterminación.
Unidas Podemos ha introducido algunos matices. El presidente del grupo parlamentario, Jaume Asens, ha subrayado que el referéndum de independencia forma parte de su programa electoral, por si quedaban dudas. No obstante, ha considerado "poco serio" que Esquerra Republicana lo plantee a través de una moción en el Congreso al cabo de dos días de las elecciones catalanas. Por todo esto, se abstendrán, porque el lugar donde se tiene que abordar esta consulta no es en la cámara baja, sino en la mesa de diálogo entre el Estado y la Generalitat.
Calvo insiste: "No es legal"
Las elecciones al Parlament ya han pasado, las urnas ya se han abierto y las papeletas ya se han recontado. Y de los comicios catalanes ha salido una mayoría independentista ampliada, tanto con respecto a los escaños como también con respecto a los votos, que superan la barrera y llegan hasta el 51% de los sufragios. Pero, para La Moncloa, este es un dato irrelevante, que está dispuesto a ignorar. Después del Consejo de Ministros de este martes, quien lo ha dejado claro ha sido la vicepresidenta Carmen Calvo, que ha reiterado que un referéndum de autodeterminación no tiene cabida en la Constitución española, saquen los votos que saquen las fuerzas independentistas. "No es legal ni constitucional", ha insistido. Es justamente lo que Pere Aragonès quiere poner encima de la mesa del Gobierno.