Una vez asumida la victoria estéril de Salvador Illa, y con un Parlament ya constituido con mayoría independentista, La Moncloa pide "celeridad". Si bien la portavoz María Jesús Montero ha evitado valorar la elección de Laura Borràs como nueva presidenta de la cámara, sí que ha querido pedir que los partidos políticos se pongan a ello a la hora de negociar la conformación de gobierno. De momento, el presidenciable Pere Aragonès mantiene abiertas vías de negociación con Juntos y la CUP y los republicanos esperan poder llegar al 26 de marzo con un acuerdo.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario de este viernes, para las ayudas a empresas y autónomos, la dirigente socialista no ha valorado la elección de Borràs porque la conformación de las instituciones "corresponde a los partidos políticos". Dicho esto, sí que ha insistido en la "necesidad y urgencia" para que se constituya un nuevo Govern de la Generalitat que dé estabilidad a Catalunya en plena pandemia y crisis económica. "Lo que queremos es que haya pronto un gobierno en Catalunya y estabilidad al conjunto de las instituciones, que siempre es un reclamo para el mercado inversor y para nuestro tejido productivo", ha defendido Montero.
"Queremos que haya un gobierno a Catalunya y estabilidad al conjunto de las administraciones para remar en la misma dirección, sumar juntos y abordar los temas que se tengan que plantear", ha reiterado la portavoz del Gobierno.
Los mismos términos ha hecho servido cuando ha sido preguntada por el posible naufragio de la moción de censura en Murcia o el adelanto electoral en la Comunidad de Madrid, que en estos momentos se encuentra en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. "Lo que este gobierno desea y quiere es que todas las comunidades y ayuntamientos tengan gobiernos cohesionados y establos para afrontar los retos económicos que ahora ocupan la prioridad del gobierno", ha asegurado Montero. A pesar de las reiteradas preguntas, no ha ido más allá en sus valoraciones.
Moción fracasada en Murcia
Giro de guion inesperado en Murcia, donde empezó todo. Con aires de tamayazo, la moción de censura de Ciudadanos y el PSOE naufragaría y no tendría los votos necesarios para salir adelante. Al menos es lo que aseguran desde el Partido Popular, que anuncian que han llegado a un acuerdo con tres de los seis diputados de la formación de Inés Arrimadas en el Parlamento murciano. De esta manera, Fernando López Miras se mantendría como presidente autonómico. En las negociaciones ha estado muy implicado el secretario general del PP estatal, Teodoro Garcia Egea, que se encuentra en la región. El portavoz de Cs en Murcia lo niega y "confía" en todos sus diputados.