Miguel Tellado, portavoz parlamentario del PP, fue el primer dirigente del PP al pronunciarse sobre la revelación de los papeles secretos de la Operación Catalunya contra el independentismo que reveló ElNacional.cat el lunes el 15 de enero, y que incriminan al gobierno de Rajoy. Tellado no rompió el silencio del principal partido de la oposición hasta el jueves 18, y lo hizo para decir que la aparición de los documentos "es una cortina de humo para justificar lo que hace al PSOE ahora" y "evitar hablar de lo que es importante: que la democracia está amenazada, y que la amenaza duerme en la Moncloa". Este sábado, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha recriminado a Tellado estas palabras y ha asegurado que la Operación Catalunya es "un uso indebido, fraudulento y vergonzoso" del Estado para intereses partidistas.
Miguel Tellado dice que el PSOE usa los medios del Estado para intereses partidistas. Nosotros decimos que en democracia hay que respetar a las instituciones públicas.
— PSOE (@PSOE) January 20, 2024
El PP considera enemigos de España a todos los que no piensan como ellos.@mjmonteroc#DestaVaiBesteiro… pic.twitter.com/S3VHABljXi
"El de las gafas que tiene menos pelo"
"Cortina de humo dice el 'tio'", ha reprochado Montero, que se ha referido a Tellado de manera sarcástica, como "este hombre que habéis enviado hacia Madrid, el de las gafas, bien los dos tienen gafas (refiriéndose veladamente a Feijóo), el que tiene menos pelo, Miguel Tellado," ha dicho la vicepresidenta primera en la convención política que los socialistas celebran durante todo el fin de semana en el Palexco de A Coruña, donde ha intervenido en un panel sobre modernización y reindustrialización con el candidato del PSOE a la Xunta de Galicia, José Ramón Gómez Besteiro. Montero ha insistido en el hecho de que la Operación Catalunya son "graves hechos antidemocráticos, que atentan contra el estado de derecho."
El "Watergate del PP"
El intercambio de golpes en el ring del caso de la Operación Catalunya se sucede cada día. El PSOE y sus dirigentes han hecho una similitud entre este caso y el Watergate, el caso de espionaje que hizo caer al presidente de los Estados Unidos Richard Nixon en los años 70. El primero en utilizar este concepto fue este jueves el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, que criticó a Tellado y afirmó que se escabulle de lo que considera "el Watergate del PP". El viernes, durante su intervención en la convención, Cerdán se volvió a referir al símil cuando repasó la "propuesta" de la derecha y la ultraderecha para España. Un libro de recetas que incluye "utilizar a la policía para informes falsos; proponer uno permanente para Catalunya o prohibir a los partidos que no nos gustan; hacer un Watergate, utilizar los servicios de la policía y la Justicia para destruir y obstruir pruebas", afirmó el secretario de organización del partido socialista. Con respecto a Montero, la vicepresidenta primera ha insistido este sábado durante su intervención en que "el primero en democracia es respetar las instituciones públicas, los poderes del Estado y nunca utilizarlo para enriquecerse de forma fraudulenta y o presuntamente para espiar los que consideran enemigos de España y que no piensan como ellos".
El partido popular, por su parte, considera que la Operación Catalunya es una "cortina de humo" para tapar "las mentiras de Pedro Sánchez" y una maniobra de "distracción" por las amenazas del PSOE de citar a comparecer a Mariano Rajoy en la comisión de investigación que se creará al Congreso de los Diputados sobre esta cuestión. El mismo expresidente del Gobierno español aseguró este viernes que "lo tienen muy crudo para llevarlo a los tribunales".
El "mentiroso" Feijóo
La vicesecretaria general del PSOE también ha cargado contra el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, al calificarlo de ser el líder del PP que menos pudor tiene a la hora de mentir desde José María Aznar. "Lo más que podemos decir es que desde Aznar no encontramos a un líder del PP que tenga menos ppudor a la hora de mentir, menos capacidad de intentar aproximarse a la realidad", aunque recordó que llegó a Madrid con una imagen de moderación, hombre de gestión y consenso. "Este que dice que no es presidente del Gobierno porque no quiere. Y yo no soy alta y rubia porque no quiero", ha asegurado Montero en tono sarcástico.