El monumento a Lluís Companys, ubicado en la rambla de Lluís Companys de la ciudad de Tarragona, ha sufrido esta noche un ataque vandálico. Ha aparecido con dos pintadas con la bandera española. Algunos tarraconenses han acusado al alcalde de Tarragona, el socialista Josep Fèlix Ballesteros, de haberse mostrado tibio con los grupos ultras y de no haber condenado con contundencia las agresiones españolistas.
El president Companys fue sometido a un consejo de guerra y ejecutado, después de haber sido entregado a Franco por la Gestapo, que lo había capturado en la Francia ocupada en agosto de 1940.
En las redes sociales se han multiplicado las denuncias del hecho, pero también ha habido muchos tuits de apoyo a los agresores y de condena al president Companys, a quien se acusa de "mandar fusilar" a miles de personas o, incluso, de ser responsable de un "genocidio".