Pifia en los Mossos d'Esquadra. Un error de cálculo ha obligado al cuerpo policial a gastarse medio millón de euros más de lo previsto en la compra de cascos y máscaras antigás para los agentes de la policía. Uno de los proyectos más ambiciosos de la Dirección General de la Policía era equiparar el material de las dos unidades policiales de los Mossos: la Brigada Móvil (BRIMO) y las Àrees Regionals de Recursos Operatius (ARRO). ¿Cuál ha sido el problema?, que los responsables de la compra no han calculado bien el pedido y no hay para todos los efectivos, en concreto, de las tallas más grandes. Según adelanta Elmon.cat, faltan un total de 250 unidades tanto de cascos como de máscaras antigás.
Nuevo presupuesto
Ante el error en los cálculos, el Departament d'Interior se ha visto obligado a hacer corriendo una nueva licitación con un presupuesto de 511.225 euros. El citado diario detalla que la nueva licitación es de procedimiento abierto, armonizado, de los contratos de sector público en los ámbitos de la defensa y la seguridad. De esta manera, Interior puede comprar el pedido adicional al fabricante al que encargó el primer paquete, que fija el precio de venta de cada casco en 1.470 euros, con el IVA incluido. La anécdota del encargo es que las prescripciones técnicas obligan a la empresa a elaborar un "tríptico explicativo en catalán de cómo funciona el casco". En esta licitación también se señala que la previsión para 2024 es aumentar el número de efectivos tanto de la BRIMO como del ARRO.
Fuentes de Interior han asumido el error y han reconocido en El Món que no saben cómo contaron, "nos faltan". La memoria justificativa de la nueva licitación detalla que el año 2021 se compraron 1.300 cascos con protección de mentón, y 800 máscaras de antigás, para proteger a los agentes "en las intervenciones de alta complejidad". El pedido tenía que cumplir una serie de características: no superar los 2 kilos y medio, resistentes a los impactos, al fuego, a la penetración, a los disolventes e incluido a la radiación ultravioleta. Además, tenían que llevar grabado el escudo de los Mossos d'Esquadra y tenía que quedar libre el espacio para el NOP (Número Operativo Policial), para identificar a los agentes. En el documento se ha detectado un "error de cálculo de las necesidades reales de cascos y máscaras", que ha comportado un "déficit de tallas de los cascos del rango inferior", por lo tanto, los Mossos solo tienen un "stock muy limitado de las dos tallas superiores".
Encarecimiento del precio
En la Memoria Justificativa, se destaca la necesidad de adquirir "250 cascos de orden público con las correspondientes máscaras antigás con el fin de alcanzar la sustitución del material obsoleto". Además, el documento apunta que "para cubrir el déficit de tallas se hace necesario disponer de un 10% de los cascos de la talla 46-52 y un 90% de la talla 53-56 de las 250 unidades que se tienen que adquirir". El error en los cálculos ha comportado que el precio haya aumentado de manera notable, mientras que la primera licitación de 2021, el precio total fue de 1.356.875 euros, es decir, la unidad sale a 1.043,75 euros. Ahora, el precio de licitación es de 1.470,75 euros cada uno. Así pues, el presupuesto base de la licitación es de 367.537,50 euros. Aparte, de los cascos también se tienen que incluir las máscaras antigás. El año 2021 tenían un precio de 445 euros cada unidad, mientras que ahora, se sitúa en los 475 euros, sin IVA. Por lo tanto, el error en los cálculos supondrá un sobrecoste de 511.225 euros, IVA incluido.