La mujer del activista Jordi Cuixart, la periodista Txell Bonet, sostiene que el Gobierno miente cuando asegura que todos los líderes independentistas estaban advertidos de las consecuencias judiciales derivadas del caso catalán. Así lo ha contado la misma Bonet en un mensaje en Twitter en el que ha cargado contra el ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, por sus palabras durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
En la comparecencia de Méndez de Vigo esta mañana, el portavoz del Gobierno ha asegurado sin ningún titubeo que los presos políticos ya sabían lo que les podría ocurrir si seguían por la vía unilateral. "No se pueden presentar como víctimas de una situación que ya conocían porque estaban advertidos", ha expuesto el ministro Méndez de Vigo, en referencia a las advertencias del TC enviadas a Govern y Parlament por el procés.
Ante esta afirmación, la mujer de Cuixart ha recordado a De Vigo que si bien los miembros del ejecutivo catalán y de la Mesa del Parlament fueron advertidos de las consecuencias judiciales, no ocurrió lo mismo con el líder de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart.
"No recibió nunca un requerimiento judicial que le alertara que cometía delito alguno", ha señalado Bonet, que ha expuesto su asombro una vez más sobre la judicialización del procés. En este sentido, Bonet sostiene que no hay atisbo de duda sobre la "vulneración de derechos" que sufren los presos y exiliados políticos.
En contra del que acaba de dir Mendez en roda de premsa @jcuixart mai va rebre cap requeriment judicial que l'alertés que cometia cap delicte. Donar suport a un referendum no és un crim
— Txell Bonet (@TxellBonet) 27 de març de 2018
De esta forma, la mujer de Cuixart contestaba a otra afirmación de Méndez de Vigo tras el Consejo de Ministros, en la que ha señalado, con la retórica habitual de Moncloa, que "la justicia en España es igual para todos" porque "nadie se puede situar por encima de la ley". Todo en una comparecencia en la que el ministro portavoz ha expresado el beneplácito del Gobierno ante la detención de Puigdemont en el norte de Alemania, además de señalar que se puede hablar de delitos de rebelión equiparables entre España y Alemania.