El editorial de El Mundo señala los independentistas como culpables de lo que consideran que es una "persecución" a la monarquía española y lamentan que Podemos e Izquierda Unida se sumen. Unos argumentos que en ningún caso explican la realidad: es la misma fiscalía Suiza quien ha pedido investigar al rey emérito Juan Carlos I por blanqueo de capitales en un escándalo sin precedentes que involucra el gobierno de Arabia Saudí. Después de filtrarlo en la prensa de Ginebra, es la fiscalía española de anticorrupción que pide más datos a la suiza para investigar las causas de una transferencia de 88 millones de euros de la monarquía saudí a Joan Carles I el año 2008.
El Mundo omite todos estos datos empíricos y argumenta que "las formaciones independentistas tienen la corona en la diana desde hace tiempo por lo que simboliza la unidad y la permanencia y no pierden la ocasión de desgastar esta institución'". Pide a todos aquellos que cargan contra los Borbones "prudencia institucional" y exige un silencio mediático absoluto hasta que la justicia no emita una resolución.
Unos argumentos que no se aguantan por ningún sitio. Hay que recordar que, en paralelo, también se están investigando comisiones irregulares para la adjudicación del AVE en la Meca donde también estaría relacionada la amiga del rey emérito, Corinna Larsen. El Mundo concluye: "Que trabaje la justicia y no caigamos en la trampa de dar por bueno un escándalo donde ya se friegan las manos quien atacan la corona como paso previo necesario para dinamitar la orden constitucional". Una constitución y unos valores que un juez puede acabar sentenciando que el rey Juan Carlos se saltó.