La campaña de cara al congreso de finales de noviembre para decidir quién debe liderar Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) los próximos años se complica cada vez más. Los carteles contra los hermanos Maragall, ideados desde la calle Calabria, donde se encuentra la sede nacional del partido, y la investigación para saber quién los ordenó, quién los financió, quién los coordinó y quién lo sabía, han impactado directamente en esta campaña fratricida entre el entorno de Oriol Junqueras, que quiere volver a presidir el partido, y el aparato actual, liderado por Marta Rovira, con Xavier Godàs como candidato a presidente. Los republicanos se han adentrado en una guerra que ha destapado, en los últimos días, cajas de truenos que hasta ahora se habían tratado de manera interna.

Uno de los casos que parece haber vuelto al debate público es la autoría de lo que aparenta ser un ataque de falsa bandera: el muñeco y las pintadas contra Oriol Junqueras que aparecieron en 2019 en un puente de Sant Vicenç dels Horts, en el Baix Llobregat. En aquel momento, el exalcalde de este municipio, Oriol Junqueras, se encontraba encarcelado tras los hechos de octubre de 2017, y lo que inicialmente se creyó que era un ataque españolista contra el presidente del partido republicano, se ha descubierto que podría haber sido diseñado desde el entorno de Esquerra. Pero, ¿quién lo ideó y quién lo ejecutó? El entorno de Marta Rovira ha hecho acusaciones públicas sin dar nombres ni pruebas. El entorno de Junqueras lo niega, pide pruebas y denuncia guerra sucia.

Vendrell y Maragall manchan a Junqueras

La respuesta aún no se ha encontrado. Policialmente, no hay ninguna investigación, ni cerrada ni en curso, sobre la autoría del muñeco. En aquel momento, tras la aparición, se reforzó la presencia policial, tanto de Mossos como de la policía local, en la vivienda de la familia Junqueras y también en la escuela, pero no se investigó quién lo había colgado. Tampoco internamente, cuando se tuvieron sospechas de que el mismo partido podría haberlo diseñado, se investigó. Hasta ahora, nadie ha asumido la responsabilidad y nadie ha podido acusar a nadie, aunque se cree que la acción fue orquestada por el mismo grupo de personas que controlaban la llamada "estructura B", y que también habían llevado a cabo otras acciones sin reivindicar. Quien dirigía la comunicación del partido en aquel momento, Sergi Sabrià, que dimitió de su cargo en el Gobierno cuando estalló el caso, admitió que se habían hecho "campañas de contraste", como las han bautizado los republicanos, pero no incluyó el caso del muñeco entre ellas.

Imagen del muñeco simulando a Oriol Junqueras en Sant Vicenç dels Horts / Cedida

En los últimos días, dos personas importantes del partido, Xavier Vendrell y Ernest Maragall, han aprovechado entrevistas en varios medios de comunicación para volver a poner este caso sobre la mesa. Vendrell, en Catalunya Ràdio, concluyó una conversación con Ricard Ustrell asegurando que cuando se supiera quién los había colgado, habría "sorpresas". En la misma línea, pero aún más explícito, fue este martes en RAC1, con Jordi Basté, quien fue el líder de Esquerra en el Ayuntamiento de Barcelona y una de las víctimas de los carteles, Ernest Maragall. Sin aportar pruebas, afirmó que creía saber de dónde habían salido y pidió que se mirara hacia Sant Vicenç dels Horts y no hacia Calabria, acusando al entorno de Junqueras de haber colgado el muñeco. El entorno de Marta Rovira comparte esta creencia y acusa directamente a una persona del entorno de Oriol Junqueras, pero no hay ninguna prueba que lo vincule con el muñeco ni con ningún incidente de los días previos a la madrugada en la que el muñeco del expresidente de Esquerra apareció colgado en este puente de Sant Vicenç dels Horts.

El entorno de Oriol Junqueras pide pruebas

La reacción del entorno de Oriol Junqueras, para negar los hechos, no se ha hecho esperar. El mismo presidente de Esquerra, este martes, ya advertía en una entrevista a ElNacional.cat que la campaña del congreso nacional se había convertido en un todos contra Junqueras. Fuentes de Militancia Decidim, la candidatura que lidera Junqueras, han explicado a ElNacional.cat que quienes tienen que presentar pruebas son los que los acusan, no ellos.

Quien fue alcaldesa de Sant Vicenç dels Horts cuando apareció el muñeco de Oriol Junqueras colgado de un puente, Maite Aymerich, ha negado "rotundamente" en RAC1, esta mañana, que el origen de la acción sea el entorno de Junqueras ni nadie de su municipio. La exalcaldesa Aymerich ha asegurado que cree saber quién está detrás del muñeco, pero no lo ha hecho público porque no tiene pruebas. "Cuando tenga pruebas las aportaré a los Mossos y al partido", ha dicho. De hecho, cree que acabarán saliendo y que se acabará sabiendo la verdad. Desde la sección local de Esquerra en Sant Vicenç ya se había pedido investigar el caso a fondo. Será, según ha dicho la alcaldesa, la única manera de que Sant Vicenç dels Horts quede "limpio de sospecha". La exalcaldesa se ha mostrado molesta con Maragall y ha pedido que, mientras no haya pruebas, "no se ensucie más" a través de declaraciones en la prensa, y lo ha enmarcado todo en la campaña contra Oriol Junqueras por parte del aparato de Marta Rovira de cara al congreso del próximo 30 de noviembre. La espera de este congreso, viendo cómo avanza esta campaña, con cuatro candidaturas y la guerra abierta en Esquerra, se hará muy larga para los republicanos.