Junts per Catalunya se ha convertido, tras las elecciones del pasado 23 de julio, en el partido que tiene la llave para decidir si Pedro Sánchez podrá ser reelegido presidente del Gobierno. Que el partido independentista se sitúa como factor clave en las negociaciones para la investidura quedó demostrado después de la visita de la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, a Bruselas para reunirse con el president en el exilio y eurodiputado de Junts Carles Puigdemont y, también, después de la conferencia de Puigdemont en Bruselas, el pasado martes 5 de septiembre, donde fijó la amnistía como condición "previa" para empezar a negociar un "acuerdo histórico" con el Estado.
Pues bien, toda esta atención sobre Junts per Catalunya ha impulsado el partido en caso de que se celebraran unas nuevas elecciones generales. Según una encuesta publicada por El Mundo, Junts per Catalunya conseguiría un escaño más que en los comicios del 23-J, ahora tiene 7 y conseguiría 8, y superaría así a ERC, que ahora tiene 7 y se mantendría también con 7 en caso de repetición electoral. Este sondeo muestra que las negociaciones de Junts con el PSOE dan sus frutos y les sitúan por delante los republicanos en caso de repetición electoral. Los de ERC, en las últimas elecciones, obtuvieron 7 escaños (igual que Junts), pero perdieron seis respecto de los comicios de 2019, en los que habían alcanzado los 13 diputados.
Según el calendario, si se repitieran elecciones, sería el próximo 14 de enero, fecha que quedaría fijada en caso de que dentro de 15 días el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, no obtenga el apoyo necesario para ser investido presidente y no se alcance un acuerdo entre el PSOE y las fuerzas independentistas para permitir la investidura de Pedro Sánchez. Según la encuesta de Sigma Dos para El Mundo, la estrategia de presión de Junts per Catalunya está dando resultado.
Resultados muy similares en caso de repetición electoral
Si Sánchez no se pone de acuerdo con los independentistas y estos no le garantizan su apoyo, se repetirían elecciones y los resultados serían muy similares a los que arrojaron los comicios del 23 de julio. El PSC, que ya no estaría encabezado por Meritxell Batet (que la semana pasada anunció que abandonaba la política y renunciaba a su acta de diputada), perdería un diputado y pasaría de 19 a 18, precisamente el que ganaría Junts per Catalunya. El PP mantendría los seis diputados del 23-J en el caso de repetirse elecciones, Sumar se quedaría igual, con siete escaños, y Vox mantendría los dos que tiene.
A Junts, tal como destaca el citado diario, no le penaliza haber pasado del "no a todo" con Sánchez a mostrarse dispuestos a sentarse a hablar, siempre con unas líneas rojas (las cuales marcó el president en el exilio durante su conferencia de la semana pasada). Durante la Diada de este lunes se pudo comprobar que Puigdemont sigue siendo reivindicado, mientras que ERC tuvo que escuchar algunos abucheos. Al inicio de la convocatoria del 11-S, los republicanos fueron abucheados por algunos de los presentes, con un "no tenéis vergüenza" y "gobierno dimisión", mientras que el resto de los manifestantes respondieron con un grito unitario de "independencia", al que se unieron los representantes de ERC. De hecho, El Mundo afirma que Puigdemont destaca como el líder autonómico más conocido entre los catalanes (94,3%), por encima del máximo responsable de ERC, Oriol Junqueras (92,2%), el presidente del Govern, Pere Aragonès (87,7%), o el socialista Salvador Illa (86,4%).
Elecciones al Parlament
La encuesta de este miércoles es doble, ya que también augura cuáles serían los resultados en caso de que se celebraran elecciones al Parlament de Catalunya, que —si no se anticipan— están previstas para principios de 2025 (las últimas fueron el 14 de febrero de 2021). Junts ya empataría con ERC en diputados y ambos partidos estarían con 31 escaños, aunque también los dos perderían porcentaje de voto y diputados respecto del 2021 (ahora ERC tiene 33 y Junts 32).
Ahora bien, el gran beneficiado, si ahora se celebraran elecciones al Parlament, sería el PSC de Salvador Illa, que se confirmaría como ganador y pasaría de 33 escaños a 36. Otro beneficiado de unas elecciones al Parlament sería el PP, que tras haber caído hasta los solo 3 diputados el 14-F de 2021, ahora ganaría 10 y alcanzaría los 13. Vox, por su parte, perdería 3 y pasaría de 11 a 7 representantes. Es fácil ver de dónde saldrían los diputados que ganaría el PP ya que, en caso de celebración de elecciones ahora, Ciutadans perdería los 6 diputados que tiene en el Parlament y se quedaría sin representación. De este modo, Cs solo conservaría un diputado en toda España, el que tiene en las Cortes de Castilla y León, Francisco Igea. Finalmente, En Comú Podem ganaría dos escaños (pasando de 8 a 10), los mismos que perdería la CUP que bajaría de 9 en 7.